Este domingo el Barça juega uno de los partidos ligueros que más pueden determinar el futuro de la clasificación. Este sábado el Real Madrid se llevaba el derbi en el Wanda Metropolitano (1-3) y se acercaba peligrosamente –a cinco puntos– a los blaugranas. San Mamés será clave para mantener la distancia de ocho puntos.
El estadio del Athletic Club ha sido históricamente uno de los campos más difíciles para los culés. El juego físico de los vascos dificulta mucho el estilo de toque. Curiosamente en los últimos años ya no se les ha dado tan mal los partidos en casa de los leones. Desde que se jugó por primera vez en el nuevo San Mamés (1-0) en 2013-14 el Barça no pierde en la Liga.
Los otros cuatro años han sido todas victorias de los blaugranas en competición liguera. Se han perdido dos veces más: en Supercopa de España (4-0) y en Copa del Rey (2-1). No en Liga. Tres de esos triunfos han sido con Luis Enrique en el banquillo (2-5, 0-1 y 0-1). La última, el curso pasado, ya con Ernesto Valverde (0-2), que volvía a su casa.
Un clásico de Primera División
El encuentro de este domingo no es un partido más entre dos equipos del campeonato. Son dos equipos históricos que, junto al Real Madrid, nunca han bajado de división. Sus duelos siempre han estado marcado por la complicidad del País Vasco y Catalunya. Pero aunque el nivel hace muchos años era parejo en la actualidad el Barça se ha distanciado enormemente. Es el cuarto club con más ligas (8) y desde el 1984 no consiguen levantar el campeonato nacional.
Laporte y Leo Messi en un Barça - Athletic Club / EFE
Los de Bilbao guardan algunas singularidades. Es un club que solo ha tenido en sus filas jugadores vascos, navarros y riojanos. Su mérito es indiscutible en un mundo lleno de millones e intereses. Siempre han sido un equipo duro de roer y con grandes resultados en la competición nacional e incluso internacional, sobretodo en la Europa League.
Su entidad social es de las pocas que quedan en el fútbol español. Junto a Barça, Real Madrid y el Osasuna son los únicos clubes que pertenecen a sus socios no a una inversión extranjera ni a una SAD manejada por accionistas.
La racha de Messi
Leo Messi es la gran duda del once y es que nunca ha perdido contra los leones en Primera División. El argentino suma 18 victorias y cinco empates contra el Athletic Club de Bilbao. En la primera vuelta (1-1), el 10 salió del banquillo y asistió a Munir El Haddadi para firmar la igualada. Luis Suárez es otro que nunca ha perdido contra los vascos en liga en los seis partidos que ha disputado. Sí que participaron en las dos derrotas en Copa del Rey y Supercopa.
Leo Messi disputando el balón en San Mamés en una imagen de archivo / EFE
El capitán del Barça también lidera la clasificación de máximos goleadores con 21 tantos. Leo Messi suma ocho jornadas consecutivas viendo portería –a última contra el Valencia (2-2)– y puede seguir la buena racha en San Mamés. Su récord es 19 jornadas seguidas marcando en la temporada 2012-13.
Seguir viendo portería
Si este domingo el Barça consigue marcar, alargará la racha a 37 jornadas seguidas viendo portería. El primer partido fue ante el Eibar (0-2) en Ipurúa el curso pasado. Los números hablan por sí solos, de las otras 36 jornadas ligueras marcando se han ganado 24 encuentros, nueve empatados y solo tres perdidos.
Una foto de Leo Messi y Luis Suárez celebrando un gol / EFE
Si Luis Suárez y Messi hacen la faena se firmarán 32 jornadas marcando como visitante. En Girona (0-2) se igualó el récord del club (31). Todo empezó en la jornada 33 de la temporada 2016-17 en el Santiago Bernabéu (2-3). Un total de 22 victorias, 8 empates y dos derrotas marcando 58 goles.
El partido en San Mamés no es un puro trámite liguero. El club necesita la victoria para seguir manteniendo distancia con el Real Madrid y agrandar su buena racha goleadora. Messi, el más decisivo de los culés, puede ser la gran novedad del once del Txingurri.