Carles Aleñá fue la gran sorpresa en el once inicial del Barça contra el Valencia (2-2). El de Mataró jugaba su segundo partido como titular esta temporada en Primera División. Como ya pasó contra el Leganés (3-1), el canterano dejó muy buenas sensaciones. Partiendo del interior derecho da un toque ofensivo al equipo.
Sus cualidades son indiscutibles. Se entiende a la perfección con sus compañeros y es uno de los centrocampistas más talentosos de la plantilla. En este curso ha jugado seis partidos y ha marcado su primer gol con ficha del primer equipo, contra el Villarreal (2-0) con asistencia de Leo Messi.
Aleñá: buena conexión con Messi
El 21 fue sustituido en el minuto 66 dando entrada a Arthur Melo. En poco más de una hora Aleñá demostró que puede ser uno de los interiores titulares para el Txingurri. Fue el tercer jugador de los culés en dar más pases (75), superado solo por los 80 de Sergi Roberto y los 91 de Ivan Rakitic. También fue el que más regates buenos consiguió, igualando a Nelson Semedo, sustituido al descanso.
El canterano habló tras el encuentro liguero y explicó la prioridad de esta semana: "Este encuentro ya ha pasado y tenemos que pensar en el Real Madrid”. Aleñá también valoró muy positivamente la actitud de todo el equipo para intentar la remontada que no llegó con un “la actitud ha sido de diez".
Leo Messi y Carles Aleñá no solo comparten banda sino que entienden el fútbol de la misma manera. El de Mataró fue el jugador que más pases recibió del argentino (17). Aunque jugó poco más de una hora tiene el honor de liderar esta estadística.
Alternativa de futuro al argentino
En la primera parte del partido de este domingo se demostró que Aleñá y Leo Messi se entienden cada vez mejor. En numerosas ocasiones, se intercambiaron la posición para facilitar la salida del balón desde atrás y aprovechar la buena visión de ambos para filtrar balones al ataque.
Aleñá, Rakitic, Arturo Vidal (Barça) en un entrenamiento previo al partido de Copa del Rey contra el Sevilla / EFE
La banda más peligrosa del primer tiempo fue la derecha. Con un centro del campo inédito (Aleñá-Rakitic-Vidal) las acciones ofensivas se producían en la banda derecha del ataque, la del catalán y el argentino. Un buen socio de ambos fue Nelson Semedo, que se sumó muy bien al ataque creando gran peligro llegando a provocar un penalti.
El 21 está cada vez más integrado al primer equipo. Ya no es un jugador del Barça B con oportunidades sino que puede competir perfectamente con los otros interiores. La temporada es muy larga y seguro que el canterano tendrá más momentos como protagonista.