Messi tiene hambre. Hambre de títulos y de fútbol. El apetito del astro argentino no conoce límites en este aspecto. Es insaciable. Una voracidad descomunal que le lleva año tras año a darlo todo con el Barça. Nunca se cansa de ganar. Siempre quiere más. Siempre tiene algún nuevo reto en el horizonte.
Tras el fiasco del Mundial de Rusia con Argentina, Messi vuelve a tener entre ceja y ceja la Champions. Este año, la reconquista de Europa es un objetivo primordial. Más, tras los tres títulos consecutivos del Real Madrid. El Barça es quien debe poner fin al dominio blanco en el continente.
Pero este año Messi no se conforma solo con la Champions. Según ha podido saber Culemanía, el astro argentino quiere repetir el triplete.
Reeditar la gesta
El Barça conquistó su primer triplete la temporada 2008-09 con Guardiola. Fue un año mágico en el que los azulgranas se alzaron con la orejuda tras vencer a Bayern de Múnich, Chelsea y Manchester United, con Cristiano Ronaldo en sus filas, en la final.
El Barça de Guardiola conquistó el triplete con Messi, Xavi e Iniesta como estandartes del equipo / ARCHIVO
La gesta la repitió Luis Enrique la temporada 2014-15, la primera del técnico asturiano en el banquillo culé. También fue una Champions memorable en la que se venció a PSG, Bayern Munich y Juventus en la final.
Leo Messi quiere repetir la epopeya. De lograrlo sería el primer futbolista en conseguir un triplete de tripletes. Esta vez, además, lo haría sin la ayuda de sus dos grandes escuderos: Xavi e Iniesta, lo que añade más valor si cabe a la gesta.
Hay equipo
El argentino está convencido de que este año el Barça tiene equipo para ganarlo todo. Pese a las dudas iniciales que suscitó la plantilla, en el tramo final del año la dinámica del grupo y los resultados han sido inmejorables. Hay equipo para ganarlo todo. Messi lo sabe. Por eso anda siempre tan risueño.
Luis Suárez, Messi y Neymar fueron las estrellas del triplete conquistado bajo las órdenes de Luis Enrique / EFE
Este año no habrá relajación. La exigencia es máxima. Los errores de la campaña pasada, cuando cayeron contra pronóstico ante la Roma, no pueden repetirse. El equipo ha aprendido la lección. No pueden relajarse en ningún momento si quieren ganar. Y Messi tiene hambre. Lo quiere todo.