Jordi Alba es insaciable. No hay lateral en el mundo con su despliegue y visión de juego, y más importante, con la conexión innata que tiene con Leo Messi. Adelantado en la línea del centro del campo frente al Levante, con el nuevo dibujo que propuso Valverde para medirse frene a los granotas, el lateral mantuvo el carril izquierdo infranqueable en defensa --con la ayuda de Vermaelen-- e intratable en ataque con sus internadas constantes.
Volvió a sacar el máximo rendimiento a su velocidad y sirvió en bandeja el tercer gol del Barça, el segundo de Messi, en un pase que todas las defensas de Europa conocen, pero que nadie puede parar. Sentenció el partido el argentino con un disparo sutil después de que también, por enésima vez, Luis Suárez dejara pasar el balón. El verdadero tridente ofensivo lo forman uruguayo, argentino y español.
Jordi Alba, máximo asistente
Con esta asistencia, suma la séptima de esta temporada. Si titularidad es indiscutible y pese a que no tiene un sustituto natural en el banquillo, aun así sería casi imposible sentarle. Lucas Digne vivió a su sombra durante sus dos temporadas de azulgrana y pese a que la dirección deportiva busca un suplente y futuro relevo, ni los mejores candidatos preocupan al de L'Hospitalet.
Jordi Alba es un pilar imprescindible para el FC Barcelona. Desde su regreso al club que le vio crecer en la temporada 2012-13, procedente del Valencia, se ha hecho dueño y señor del carril izquierdo. Todos sus entrenadores, a excepción de Luis Enrique, han encontrado un hueco siempre para el 18, independientemente de, esquema con el que jugará el equipo.
Frente al Levante se repitió el 3-5-2 de Luis Enrique --por momentos un 3-4-3-- pero Ernesto Valverde contó con él. De hecho, el cuarto futbolista más utilizado por el Txingurri --y el tercero de campo--, solo por detrás de Ter Stegen, Busquets y Piqué. Miranda es hoy por hoy su sustituto cuando se requiere descanso, pero sus cifras son difíciles de suplir.
Futbolista | Liga | Copa | Champions | Supercopa | Total |
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Ter Stegen | 1.440 | 0 | 450 | 90 | 1.980 |
Piqué | 1.440 | 0 | 450 | 90 | 1.980 |
Sergio Busquets | 1.292 | 45 | 495 | 90 | 1.922 |
Jordi Alba | 1.370 | 0 | 450 | 90 | 1.910 |
Rakitic | 1.252 | 45 | 490 | 45 | 1.832 |
L. Suárez | 1.268 | 0 | 360 | 90 | 1.718 |
Messi | 1.141 | 0 | 297 | 90 | 1.530 |
Coutinho | 905 | 0 | 501 | 0 | 1.406 |
Lenglet | 780 | 57 | 460 | 90 | 1.389 |
Dembelé | 836 | 90 | 320 | 86 | 1.332 |
Semedo | 741 | 152 | 288 | 90 | 1.271 |
Desde que llegó al Camp Nou, su cuenta solo ha ido en ascenso continuado: 14 goles y 48 asistencias. Toda una garantía ofensiva.