Dembelé es un caso incorregible. Genio y figura hasta la sepultura. Tras completar un gran partido en el derbi, golazo incluido, el domingo volvió a las andadas y se presentó dos horas tarde al entrenamiento. “Me he dormido”, explicó al club. Al menos esta vez no buscó excusas. Aunque Ernesto Valverde es reacio a las sanciones, el Barça podría suspender al jugador de empleo y sueldo.
El principal problema de Dembelé es la reiteración en su comportamiento indisciplinado. No aprende. Es más, parece que todo le dé igual. Cuando llegó el domingo a la Ciudad Deportiva ya no quedaba nadie. Después de un partido se acostumbra a hacer un entreno suave, de recuperación, de apenas una hora de duración. A la hora a la que llegó, ni siquiera Valverde se interesó en hablar con él.
El Barça podría sancionarlo
La sanción disciplinaria por impuntualidad está perfectamente estipulada en el convenio colectivo de los futbolistas. En el caso de impuntualidad o ausencia en un entrenamiento, se considera sanción leve cuando estas tengan lugar en dos ocasiones y superen los veinte minutos. De modo que, en este caso, el Barça estaría habilitado para suspender de empleo y sueldo al jugador durante un día y podría imponerle una multa económica de hasta el 4% de su salario.
Además, en caso de que el jugador cometiera tres sanciones leves, el asunto pasaría a cobrar mayor gravedad. También es susceptible de sanción grave cometer dos faltas por impuntualidad dentro del mismo mes. En este caso, el Barça podría suspender de empleo y sueldo al jugador de dos a diez días, además de una multa económica que puede llegar al 11% en los salarios superiores a 100.000 euros mensuales, como es el caso de Dembelé.
El caso más grave
De momento, la sanción de Dembelé no pasaría de una falta leve, pero de reiterarse su indisciplina la cosa podría empeorar. Las faltas muy graves se deben a la comisión de tres faltas graves en una misma temporada o infracciones como tres o más ausencias injustificadas al trabajo, la reducción voluntaria del rendimiento, simulación de enfermedad, etc. También en el caso de acumular cinco faltas de impuntualidad en el mismo mes.
Imagen de archivo de Dembelé en un entrenamiento del Barça / EFE
Llegados a este extremo, el Barça podría suspender al jugador de empleo y sueldo entre 11 y 30 días, además de una multa económica que podría llegar hasta el 35% en los sueldos superiores a los 100.000 euros mensuales.
El caso Dembelé
Ni el FC Barcelona ni Ernesto Valverde son partidarios de tomar este tipo de medidas. Prefieren hablar con el jugador para hacerlo entrar en vereda. En el fondo, las imposiciones y las multas no ayudan a crear un clima favorable. De lo que se trata es de conseguir que Dembelé entienda que su actitud debe cambiar. Para beneficio propio y de todos.
Estas últimas semanas parecía que el jugador había mejorado su comportamiento. Disfrutaba de minutos, jugaba bien y recibía el aplauso del público. Sin embargo, Dembelé ha vuelto a demostrar que sigue siendo un inmaduro. Queda mucho por hacer. Falta psicología.