Era uno de los duelos más esperados del partido entre el Barça y el Villarreal. Gerard Piqué y Gerard Moreno volvían a verse las caras tras sus tensos enfrentamientos de la temporada pasada en los derbis barceloneses. Y ambos revivieron sus viejas rencillas.
A principios de 2018, Barça y Espanyol se cruzaron en los cuartos de final de la Copa del Rey. Los azulgrana se impusieron en la eliminatoria y a los pocos días ambos clubes volvieron a encontrarse en partido de Liga. El encuentro se disputaba en el estadio del conjunto blanquiazul y la polémica saltó por una declaraciones de Gerard Piqué en las que se refería al equipo perico como “el Espanyol de Cornellà”.
Las inoportunas palabras de Piqué no sentaron bien en entre los espanyolistas. Gerard Moreno respondió con contundencia: "Estamos orgullosos de jugar en Cornellà el Prat. Todo el mundo sabe dónde se fundó el club y el que tenga dudas que mire el escudo, que lo pone bien clarito", sentenció. Se había iniciado una guerra dialéctica entre los dos Gerards. Y las hostilidades se trasladaron al campo.
En el choque liguero el Espanyol se adelantó en el marcador. Sin embargo, Gerard Piqué empató el partido a pocos minutos del final y se llevó el dedo índice a la boca para hacer callar a la afición periquita, que le había estado pitando todo el encuentro. Minutos después, Gerard Moreno, en un arrebato de rabia, realizó una dura entrada por detrás a su tocayo en el Barça. Se montó una tángana de aúpa en el campo y ambos estuvieron a punto de llegar a las manos.
Volvieron las hostilidades
El domingo en el Camp Nou volvieron a saltar chispas. El delantero y el central se enzarzaron en dos acciones. En la primera, en una disputa por un balón dividido, el central del Barça braceó y le dio un manotazo en la cara al delantero del Villarreal.
Gerard Moreno reaccionó al instante y se fue a por Piqué, quien le recibió con una sonrisa irónica y le acarició la cabeza por detrás. El gesto encendió aún más al delantero amarillo, que se quitó la mano del azulgrana de encima. Se habían iniciado las hostilidades.
Ambos volvieron a enfrentarse en el minuto 78. En una disputa aérea por el balón, Moreno cargó con la cadera cuando Piqué ya había saltado. El central azulgrana le recriminó la acción y ambos se encararon en actitud desafiante, frente contra frente, con las cabezas pegadas durante varios segundos, como dos púgiles antes del combate. La tensión se mascaba en el aire. La sangre no llegó al río y poco después Gerard Moreno fue sustituido, llevándose una sonora pitada del Camp Nou.
El conflicto sigue abierto
El duelo futbolístico se lo llevó Gerard Piqué, marcando el primer gol azulgrana en la victoria del Barça sobre el Villarreal (2-0). Al inicio del partido ambos protagonistas ni se miraron cuando los dos equipos se saludaron de forma protocolaria antes del pitido inicial. Al final, mientras el central culé se iba para los vestuarios, Gerard Moreno lo buscó y le dedicó unas palabras. Volverán a verse las caras.