Arturo Vidal empieza a callar bocas. En su tercera titularidad con el Barça, disputó por primera vez los noventa minutos del encuentro y lideró al equipo azulgrana en la agónica victoria frente a la Cultural Leonesa (0-1).
El centrocampista chileno fue de los pocos jugadores del Barça que se tomaron el partido en serio. Él y los canteranos fueron los únicos que respetaron al modesto rival de la Segunda División B. Arturo Vidal estuvo conectado en el partido desde el minuto uno. Se mostró a muy buen nivel y asumió la responsabilidad de un equipo plagado de suplentes y jugadores del filial. El chileno ejerció de capitán. Como a él le gusta. Y se sintió cómodo liderando al equipo.
Polifacético
Arturo Vidal demostró su versatilidad a lo largo del encuentro. Supo adaptarse a las necesidades del equipo en cada momento. Arrancó el partido como media punta, con libertad para moverse en el centro del campo y subir al ataque. Sin embargo, la lesión de Sergi Samper en la primera media hora de juego obligó al chileno a retrasar su posición para ejercer de volante de contención. Arturo Vidal cumplió a la perfección con el cometido.
Sólido y solvente, el centrocampista chileno se ganó los aplausos de la afición culé. Los hinchas del Barça destacaron su actitud. La capacidad de jugar con la misma motivación unos dieciseisavos de final de Copa ante la Cultural Leonesa y un clásico ante el Real Madrid. Jugar cada partido como si fuera una final. Arturo Vidal estuvo activo todo el encuentro. Ambicioso. No paró de correr y dar empuje al equipo. Demostró garra.
Decisivo
Arturo Vidal fue sin duda el mejor futbolista azulgrana sobre el terreno de juego. Rápido e incombustible. Dinámico. Moviendo el balón al primer toque con sus compañeros. Fue con diferencia el jugador que transmitió más seguridad.
Arturo Vidal ante la Cultural Leonesa / EFE
La magnífica actuación del chileno solo fue comparable con la de Jasper Cillessen. El cancerbero salvó al equipo en al menos tres ocasiones claras de gol con sus grandes intervenciones. Pero sobre el césped, Arturo Vidal fue quien cargó con el peso del equipo. Las palabras de Ernesto Valverde asegurando que sería útil cada vez tienen más sentido. Arturo Vidal empieza a demostrar su valía en el FC Barcelona.
Lapsus a lo Sergio Ramos
Arturo Vidal estaba tan emocionado al final del encuentro que cometió un desliz de campeonato. A lo Sergio Ramos. Quizá no supiera cómo funciona la Copa del Rey. “Nos vamos contentos porque hemos conseguido los tres puntos”, declaró ante la prensa, ignorando que la Copa es una eliminatoria donde no hay puntos que valgan. Sergio Ramos hizo lo propio en 2011, tras medirse al Olympique de Lyon en los octavos de final de la Champions, donde lamentó no haber conseguido los tres puntos en el partido de ida.