Cuna del fútbol alegre y de fantasía, Brasil ha estado muy identificado con el conjunto azulgrana. Desde Evaristo hasta Neymar, pasando por Rivaldo o Ronaldinho, ambos galardonados con el Balón de Oro vistiendo la camiseta del Barça, la presencia de jugadores brasileños en el conjunto culé ha sido muy amplia a lo largo de la historia.

Sin embargo, hacía ya algunas temporadas que Brasil no tenía la notoriedad que acostumbraba en el Barça, algo que parece haber cambiado y más tras el partido del pasado miércoles contra el Inter de Milán. Coutinho, Arthur y Rafinha partieron de inicio, se entendieron entre ellos y cuajaron una actuación destacada, tanto que su presencia en el clásico se intuye como algo normal.

Asentados

Los tres funcionaron bien juntos, pero a cada uno de ellos se les demandan funciones diferentes y determinadas. Para Coutinho y Arthur la presencia en el once titular, aunque siempre hay cosas que mejorar, está muy bien encarrilada. El ex del Liverpool empezó la temporada desubicado y jugando en una posición que no era la suya, pero cuando Valverde apostó por el para completar el ataque el resultado fue muy positivo.

Una foto de Rafinha durante el partido frente al Inter / EFE

Una foto de Rafinha durante el partido frente al Inter / EFE

Al 7 es al que más se le exige y cualquier detalle, por mínimo que sea, es mirado con lupa. Pese a que en algunos partidos ha tenido momentos de distracción, es el más determinante de los tres. Por su parte, Arthur rompió las expectativas cuando el técnico azulgrana le dio la titularidad en Wembley. El centrocampista mostró buenas maneras y desde entonces es uno de los fijos.

El último en llegar ha sido Rafinha. El hispano brasileño arrancaba la temporada sin demasiadas opciones a tener minutos de juego, pero con Leo Messi lesionado, ha sido capaz de postularse como la solución más correcta y, por lo visto el pasado miércoles en el Camp Nou, la más correcta. El partido realizado contra el Inter de Milán no le hace titular indiscutible, aunque a partir de ahora tendrá mucho más peso para Ernesto Valverde.

Trabajadores

Una de las cosas que más llama la atención de los tres protagonistas es que escapan de la imagen tópica de los brasileños que adoran el pasarlo bien fuera del terreno de juego. Coutinho, Arthur y Rafinha siempre se han mostrado como jugadores disciplinados y trabajadores, de hecho este ha sido un punto clave para que el menor de los Alcántara fuera el escogido para suplir a Messi.

Una foto de Coutinho durante el partido frente al Inter de Milán / EFE

Una foto de Coutinho durante el partido frente al Inter de Milán / EFE

Lejos de quejarse por no jugar o no contar con los minutos deseados, los tres ofrecen un gran trabajo diario y el conocimiento del estilo de juego del Barça basado en el control y toque del balón. Tal vez su fútbol no desprenda la fantasía de otros compatriotas que vistieron la camiseta azulgrana, pero lo compensan con un excelente juego de equipo.

De Coutinho ya se sabía de lo que era capaz, Arthur sorprendió a propios y extraños y Rafinha, desde la sombra, se ha alzado como una pieza a tener en cuenta dentro de la plantilla. Si Ernesto Valverde sigue apostando por ello hasta la vuelta de Leo Messi, el trío brasileño dará mucho que hablar, y para bien, en el Camp Nou.