La historia de Leo Messi y los postes viene de largo, pero no se acaba. El argentino es el vigente ganador de la Bota de Oro en Europa con los 34 goles que marcó la temporada pasada, un trofeo que ya conquistó en la 2016-17 cuando marcó 37 goles en 34 encuentros. Unas cifras estratosféricas que solo tienen un defecto. Podrían ser un par de decenas más.
Y es que el '10' azulgrana es el jugador de Europa que más veces se topa con los postes. A mediados de febrero de la temporada pasada el Barça redució sus goleadas por culpa de 33 palos, de los cuáles 17 salieron de las botas de Messi. Una cifra que el barcelonismo espera que no se repita, pero que va por el mismo camino.
Números de escándalo
En nueve partidos oficiales, el argentino ha mandado el balón al fondo de la red en ocho ocasiones --cinco tantos en liga y un hat-trick frente al PSV en Champions-- pero se ha topado con siete postes. Algo que elevaría su cifra goleadora a 15 tantos. Su tensión con los postes empezó en el primer trofeo en juego de la temporada. La Supercopa de España. Messi estrelló el balón en el palo y Piqué aprovechó el rechace para marcar el 1-0. Ya en liga, los palos evitaron el gol del argentino. Dos veces contra el Alavés, uno contra el Huesca, uno en el empate contra el Girona, uno contra Leganés y la última frente a Athletic en el último encuentro liguero.
Una costumbre que perisgue a Messi y que ante la falta de gol de esta temporada deberá afinar todavía más su puntería.