El exjugador inglés David Beckham ya ha iniciado su campaña de fichajes para la temporada 2020. El año en que su nueva franquicia, el Inter de Miami, debutará en la liga estadounidense de fútbol; la Major League Soccer. La leyenda británica se ha dado de margen dos años para llevar a cabo un proyecto económico y deportivo de otro nivel y que pueda competir con las grandes fortunas de una liga que dominan muy pocos.
Por ello, quiere contar con los mejores jugadores de Europa que han decidido o quieren retirarse en el país norteamericano. Con esa fecha de salida y un proyecto ambicioso, Messi ha entrado en los planes de Beckham para hacer realidad un sueño. Una franquicia de nivel deportivo casi europeo y con un potencial de marketing inigualable.
Messi, el elegido
El astro argentino es la estrella que ha elegido David Beckham para liderar a su equipo. Sabe que en 2020 el argentino tendrá 33 años y que todavía quedará mucho fútbol en sus botas para una liga que físicamente mucho menos exigente.
Para conseguir su fichaje, Bekcham tentará a Messi con una oferta irrechazable un año antes de acabar contrato con el Barça. Algo que de momento no preocupa al Barça ya que tiene contrato hasta 2021, pero es una operación a la que el club tendrá que prestar mucha atención según se desarrollen estas dos temporadas.
De momento, no ha habido contactos oficiales con el jugador ni su entorno. Desde la secretaría técnica de Miami manejan muchos nombres y distintos presupuestos, pero sí admiten que Messi es su máximo deseo y una de las prioridades del club que se estrenará en 24 meses.
Hacer caja o cumplir su sueño
Beckham sabe que para convencer al argentino tienen que darse muchos factores. El deseo del argentino siempre ha sido volver a su país natal y poder jugar en el fútbol argentino, pero en las últimas entrevistas que ha concedido siempre ha destacado su preocupación por el peligro que supone vivir y jugar en Argentina.
Además, ahora tiene tres hijos. La estabilidad de su familia es su prioridad y parece ser que Leo podría meditar quedarse en Barcelona después de retirarse de la primera línea del deporte. Aun así, Beckham también tiene a favor otras motivaciones que podrían convencer a Messi.
En primer lugar, la cuantía económica que percibiría en sus últimos años como futbolista en activo. Una fortuna por ser el reclamo de un equipo nuevo y de un nivel menos exigente al que el '10' azulgrana está acostumbrado. La ciudad también juega a su favor. Miami es una de las ciudades estadounidenses más europeizadas y con un clima similar al Europeo. Además, el español está muy presente en la población local y sería un incentivo para sus hijos a nivel formativo.
De momento, todo son especulaciones e intenciones sin acercamiento real al jugador, pero Beckham ya piensa en la 'operación Messi'.