Luis Enrique se ha visto obligado a renovar las caras de la Selección Española. Y es que desde que España se coronara campeona de Europa en 2008, campeona del mundo en 2010 y revalidara el título europeo en 2012, los azulgranas han sido la base de una selección que alcanzó la gloria.
El 'tiki-taka' iniciado por Luis Aragonés y prolongado por Del Bosque residió en las botas de grandes jugadores. La mayoría azulgranas. La primera Eurocopa solo tres jugadores --y leyendas-- se alzaron con el título. Carles Puyol, Xavi Hernández y Andrés Iniesta. Era el inicio de una nueva generación, que conseguiría tocar el cielo dos años más tarde. Fue entonces cuando el juego de 'La Roja' enamoró al mundo.
Ascenso azulgrana
Dos años más tarde, siete azulgranas expusieron al mundo el mejor fútbol. Acompañados de grandes jugadores, como Iker Casillas, Sergio Ramos, Xabi Alonso, Villa o Torres, los de Can Barça --Víctor Valdés, Piqué, Puyol, Busquets, Xavi, Iniesta y Pedro-- conformaron un equipo inigualable. Todos ellos indiscutibles en su posición, excepto Valdés como segundo portero y Busquets que entró en convocatoria a última hora, pero que pudo reivindicarse dos años más tarde.
En 2012, misma historia. La hegemonia del Barça en España y Europa era incontestable y la Selección se benefició de ello. Otros siete azulgrana volvieron a dominar Europa. Valdés, Piqué, Xavi, Iniesta, Busquets, Cesc y Pedro. Una Selección que alcanzó la gloria y que, casualidad o no, ha vivido su decadencia con la marcha de jugadores fundamentales en el esquema.
La transición
En 2014 vino el batacazo. Una generación de oro que no supo ver la necesidad de regenerarse. Seis azulgranas conformaron esa convocatoria que pretendía conseguir un hito histórico y se estrelló en la fase de grupos. Fue la despedida de Xabi Alonso y Xavi. Antes ya se había despedido Puyol. En 2016, más de lo mismo.
Ahora, con la renuncia de Piqué y la falta de españoles en el Barça, solo quedan dos supervivientes. Busquets como cerrojo en el centro del campo y Sergi Roberto, como el "jugador total" tal y como le ha definido Luis Enrique en su rueda de prensa. Piqué no quiere ir, pero 'Lucho' espera poder convencerlo.
El nuevo seleccionador sabe que el combinado nacional necesita nuevas caras. Piernas frescas y llenas de ilusión. El juego del Barça no ha cambiado, pero los apellidos no son españoles. Una pena para 'La Roja' y una preocupación para el Barça. Un síntoma más de su falta de atención a la cantera.