Dembelé remata contra el Chelsea EFE
El futbolista del Barça que más celebró la derrota del PSG contra el Chelsea
La derrota del equipo de Luis Enrique en la final del Mundial de Clubes beneficia a un futbolista azulgrana en sus aspiraciones de ser Balón de Oro
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El PSG sufrió una derrota tan inesperada como cruel en la final del Mundial de Clubes. El Chelsea fue muy superior y se impuso al equipo de Luis Enrique por 3-0 en Estados Unidos.
El equipo de Enzo Maresca aprovechó las autopistas abiertas por Achraf Hakimi y Nuno Mendes a sus espaldas. Cole Palmer también brilló, con un doblete de goles y una asistencia a Joao Pedro. En el PSG, en cambio, las estrellas estuvieron apagadas.
Luis Enrique
La derrota fue un duro golpe para Luis Enrique, que le dio un manotazo a Joao Pedro y será sancionado. "Soy tonto. Está así parado, me empuja, le toco y se tira", explicó el técnico asturiano. También acabó frustrada la estrella del PSG, Ousmane Dembelé. El extremo galo no tuvo su día.
Cole Palmer celebra su doblete al PSG en la final del Mundial de Clubes EFE
La contundente derrota contra el Chelsea frena las aspiraciones de Dembelé de ganar el Balón de Oro de 2025. El delantero francés es el gran rival de Lamine Yamal, la nueva sensación del Barcelona y del fútbol europeo.
Dembelé, apagado
Lamine Yamal, hoy, tiene más número que Dembelé de ser elegido Balón de Oro. Su temporada es excepcional y la derrota del futbolista del PSG le favorece.
El golazo de Lamine Yamal contra el RCD Espanyol EFE
El joven delantero del Barça, que el domingo cumplió 13 años, se jugará el máximo reconocimiento en los próximos meses. Necesita que el equipo de Hansi Flick arranque como una moto, igual que hace un año, para ser distinguido como mejor futbolista del mundo.
Dembelé y Lamine Yamal, pasado y presente del Barça, viven días de gloria. Los dos tienen mucha clase y son delanteros. El francés es diestro, comenzó en la banda derecha y ahora juega por el centro. El español es zurdo y actúa como extremo, por la derecha, aunque en el Camp Nou no descarten que acabe como Messi, como falso delantero centro.