El legado de Òscar Grau tras seis temporadas en el Barça
El exjugador de balonmano es el séptimo ejecutivo despedido por Joan Laporta
28 abril, 2021 17:30Òscar Grau ya no es el CEO del FC Barcelona. Joan Laporta, tras una reunión de la comisión delegada el pasado lunes, decidió prescindir de sus servicios. El nuevo presidente ya anunció días después de ganar las elecciones que el máximo cargo ejecutivo será para Ferran Reverter, ex de MediaMarkt.
El hasta ahora director ejecutivo es el primer exdeportista profesional en ocupar dicho cargo en la entidad. Es una de las leyendas del balonmano azulgrana y tiene su dorsal, el 2, retirado en el Palau Blaugrana. Como jugador consiguió la primera Copa de Europa en 1991, tres Recopas y seis Ligas.
Después de retirarse y pasar por la Federación Catalana de Vela y la Federación Catalana de Balonmano, aterrizó en el Camp Nou en 2015 como director de las FCB Escoles. Un año después, en 2016, fue nombrado CEO de la entidad y se convirtió en uno de los hombres de máxima confianza de Josep Maria Bartomeu.
Bartomeu Oscar Grau, escuchan a José Mari Bakero / CULEMANIA
Òscar Grau ostenta como CEO, de momento, el récord de ingresos en la historia de un club de fútbol. En la temporada 2018-19 fueron 990 millones de euros y tenía como objetivo superar la cifra de los 1.000 en la siguiente, algo que fue inviable después de la aparición del coronavirus en nuestra sociedad.
Clave en los fichajes
Pero si hay algo por lo que el exdirector ejecutivo fue conocido fueron los fichajes. Cuando cogía el avión era porque solamente quedaban los últimos detalles para cerrar. Asumió esas tareas tras la salida de Raúl Sanllehí, compaginando el cargo de director general con el de responsable de negociar las contrataciones deportivas, posición que ahora ocupa Mateu Alemany. La fotografía más popular se dio en enero de 2019, cuando viajó junto a Josep Maria Bartomeu a Ámsterdam para cerrar el fichaje de Frenkie de Jong.
Frenkie de Jong, con Josep Maria Bartomeu y Óscar Grau, alto ejecutivo del Barça / FCB
También intentó en verano de 2019 la incorporación de Neymar Junior, viajando a París con Javier Bordas para convencer al PSG, quizás su viaje frustrado más conocido. El último, crucial, lo realizó el pasado verano a Países Bajos para cerrar la incorporación de Ronald Koeman como relevo de Quique Setién.
Reajustando las cuentas
En los últimos tiempos, renovaciones y traspasos a parte, se ha centrado en cuadrar los números de la entidad. Desde que explotó la crisis de la pandemia, sus deberes han sido reajustar la masa salarial y encontrar nuevas vías de ingreso. Ahora toda esta información ya está en manos de su sucesor, Reverter.
El exjugador también tuvo un papel capital en los acuerdos de financiación del Espai Barça con Goldman Sachs --pendientes de validar-- y las compañías candidatas para comprar el 49% del Barça Corporate. Dos vías de negocio que podrían amortiguar el impacto de la crisis económica.
Òscar Grau en una rueda de prensa con el FC Barcelona / EFE
Saliendo de las oficinas del Barça, Grau ha tenido importancia también como representante de la entidad. Ha participado en reuniones de la RFEF, la Liga, UEFA y ECA defendiendo los intereses del club. Sin ir más lejos, la semana pasada participó en un encuentro de los dirigentes de la Euroliga de baloncesto.
Su gestión le ha llevado a ganar varias distinciones como el Mejor Dirigente Profesional por la Associació Catalana de Dirigents de l’Esport en 2016, el Mejor Gestor Deportivo del año por la Associació Catalana de Gestors Esportius en 2019 y el CEO del año en los I Premios a la Excelencia Empresarial de El Economista en 2019.
Final convulso
La salida de Òscar Grau del Barça estará marcada por el caso Barçagate. Él, junto a Bartomeu, Jaume Masferrer y Román Gómez Ponti; están siendo investigados por presuntamente utilizar 2,3 millones del club para mejorar la imagen del expresidente y erosionar la de sus rivales. El caso sigue abierto y pendiente de resolución.
Este aspecto y el hecho de ser una persona muy próxima a Bartomeu han sido determinantes para que Laporta decida su despido. Sin embargo, el nuevo presidente azulgrana ha intentado despedir a Grau de la mejor manera posible, como ha comunicado a través de sus redes sociales. El propio ejecutivo ha enviado un mensaje de agradecimiento a todo el personal del club, demostrando su elevado barcelonismo.