El legado que dejó Mateu Alemany en Valencia y Mallorca
El director de fútbol del Barça de Joan Laporta dejó huella en sus dos antiguos clubes
28 marzo, 2021 23:36Mateu Alemany es uno de los hombres fuertes con los que cuenta Joan Laporta en su regreso a la presidencia del FC Barcelona. Ocupará el cargo de director de fútbol. El ejecutivo mallorquín será el encargado de negociar los fichajes que pida la secretaría técnica y representar al club institucionalmente.
La carrera de este abogado de formación en el mundo del fútbol se puede resumir en dos clubes: el Mallorca y el Valencia. Empezó su etapa en el equipo insular en 1990 como adjunto a la gerencia del club y en el año 2000 se hizo con la presidencia de la entidad. Estuvo cinco temporadas.
Mateu Alemany como presidente del Mallorca / EFE
Años después, en 2017 volvió a primera línea mediática de la mano del Valencia CF. Fue director general del proyecto de Peter Lim, nuevo propietario de la entidad valenciana. Salió dos temporadas después con un equipo que rendía en la élite por desavenencias con la dirección, concretamente por la llegada de fichajes y la destitución repentina de Marcelino García Toral.
Título y entrenadores en Mallorca
Alemany coge al Mallorca en su primera temporada en Segunda División y lo asciende a Primera División en la cuarta. En 1998-99 le gana una Supercopa de España al Barça de Van Gaal al clasificarse como subcampeón de la Copa del Rey. Ese mismo curso terminaría tercero en la Liga y llegó a la final de la Recopa.
Siguieron en lo más alto de la clasificación española, llegando a disputar la Champions League, pero el gran título que se le recuerda fue la Copa del Rey de 2005. Vencieron en la final al Recreativo de Huelva con un equipo entrenado por Gregorio Manzano. También salvaron la categoría, pero el presidente dejó el cargo.
Mallorca ganando la Copa del Rey 2005 / Redes
En estas doce temporadas de Mateu Alemany vinculado a la dirección se suceden hasta 19 cambios de entrenador. Héctor Cúper, Luis Aragonés y Gregorio Manzano pasaron por dos etapas y solamente duraron una temporada en cada uno de los periodos. Los entrenadores no fue la carpeta más inestable de los insulares.
Sí que consiguió llenar las arcas de la entidad vendiendo a los jugadores que más destacaban del Mallorca. El récord lo firmó Samuel Eto’o, que fichó por el Barça, en 2004, por 27 millones. También salieron Diego Tristán (18 millones), Albert Luque (15M), Dani García (15M) o Ariel Ibagaza (5M). Su política, como pequeño club, era vender caro, comprar barato y generar plusválua.
Tándem con Marcelino en Valencia
En 2017, Alemany vuelve al fútbol: al Valencia. Peter Lim le da la responsabilidad de la dirección general y de las primeras decisiones que toma es la de contratar a Marcelino García Toral como entrenador. El asturiano fue el único entrenador con el que estuvo en Mestalla, pues salieron juntos en 2019 después de levantar la Copa del Rey.
Ese equipo, clasificado para la Champions League en dos temporadas, ganó la competición copera contra el Barça de Ernesto Valverde. Semanas después era destituido Marcelino, Mateu Alemany y Pablo Longoria, responsable de la dirección deportiva. Según medios valencianos, Peter Lim veía que se le escapaba el control del club.
Mateu Alemany y Marcelino, en rueda de prensa con el Valencia / EFE
En cuanto a fichajes, hizo operaciones como los fichajes de Gonzalo Guedes (40 millones), Geoffrey Kondogbia (22M), Kevin Gameiro (14M) o Maxi Gómez (14,5M). Las incorporaciones fueron uno de los motivos de discusión más grande con la dirección del club. El propietario no respondía a las necesidades del entrenador y por eso se rompió la relación.
Buen negociador, poca estabilidad
Sobre Mateu Alemany muchos coinciden lo bien que se mueve en los despachos y sus habilidades negociadoras. También es un gran conocedor del fútbol español y de las instituciones. Se lleva bien con Javier Tebas, presidente de la Liga, y en 2007 quiso presidir la RFEF, pero su candidatura no tuvo los apoyos suficientes.
Hay más dudas sobre el estilo de fútbol que le gusta --su experiencia demuestra que muy de toque no es--, algo que en el Barça no tendrá mucha importancia. El área deportiva la llevará Jordi Cruyff y su equipo y él será el encargado de negociar aquello que le pida la secretaría técnica. Veremos como funciona este engranaje.