Bartomeu lo tiene claro: el primer crack del Barça en pasar por caja

La actual estructura de la plantilla del Barça tiene unas cuantas peculiaridades. En el vestuario culé se combinan un grupo de veteranos consolidados y un nutrido grupo de jugadores, muchos de ellos bastante jóvenes, con una experiencia mucho menor en la estructura blaugrana.

Entre los primeros abundan estrellas de primer nivel mundial. Jugadores que se han hecho un nombre jugando en el Camp Nou hasta convertirse en figuras deseadas por los grandes clubes de Europa.

Esta amenaza embarcó hace ya unos años al Barça en un carrusel de renovaciones de contratos y subidas salariales que mantiene ocupados semana tras semana a los abogados y expertos laborales del club.

Salarios de primer nivel

Este torrente de firmas y documentos está teniendo también otra consecuencia evidente. Los altísimos salarios –al nivel de los que pagan otros equipos por jugadores punteros- ocupan a día de hoy una parte muy elevada del presupuesto total del que dispone la entidad. En porcentajes muy por encima de lo recomendado por expertos y consultoras.

Sin embargo, desde la entidad que preside Josep Maria Bartomeu se entiende que este es un mal trago que hay que pasar. Si el Barça quiere mantener en plantilla a algunos de los mejores jugadores del mundo, es imprescindible ponerse al nivel de salarios que se pagan en otros clubes con mayor capacidad financiera.

La primera mejora

Dentro de este contexto, desde los despachos del Camp Nou se preparan desde hace meses las próximas renovaciones de cracks del equipo. Y la primera afecta a un jugador absolutamente imprescindible desde hace años tanto paro los técnicos como para la afición.

La mejora contractual de Sergio Busquets es un tema en el que se está trabajando desde hace tiempo. Y la firma definitiva del centrocampista podría llegar en las próximas semanas.

Sergio Busquets es un fijo para Ernesto Valverde / EFE

Sergio Busquets conversa con Ernesto Valverde en un entrenamiento / EFE

Club y jugador tienen prevista una reunión clave la semana que viene. Un encuentro en el que se acabarán de perfilar y consensuar todos los puntos del nuevo contrato del de Badia del Vallès.

Hasta 2023

Hay que tener en cuenta que Busquets firmó su última renovación en 2016, con una ampliación de contrato de cinco años más dos opciones, a lo que se añadía una cláusula de rescisión de 200 millones de euros.

El canterano blaugrana, de 30 años, está convencido que quiere dar lo mejor de sus últimos años de carrera futbolística en su club de siempre. A pesar de la llegada y salida de jugadores, y del propio paso del tiempo, Busquets es un fijo para Ernesto Valverde, al igual que ocurre desde hace años con la Selección Española.

Esa singularidad como jugador –no existe a día de hoy otro como él en el mercado- garantiza la mejora contractual que el centrocampista y su entorno pidieron al club. Y es que ninguna de las dos partes quiere romper un idilio que se mantiene desde que Pep Guardiola decidió poner al chaval de Badia de titular en su primer temporada en el banquillo culé.