Laporta levanta la Supercopa tras la victoria del Barça ante el Real Madrid

Laporta levanta la Supercopa tras la victoria del Barça ante el Real Madrid EFE

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La semana grande de Laporta: de salvar el cuello a la segunda humillación del Barça al Real Madrid

El presidente azulgrana celebra su cuarto título desde 2021 tras superar unos días muy complicados por los problemas para inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor

Más información: El Barça destroza al Real Madrid con una 'manita' histórica

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Joan Laporta, presidente del Barça, vive al día y al límite. Comenzó la semana con la amenaza de un voto de censura, se desahogó con un corte de mangas e insultos tras obtener la cautelar para inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor, y la terminó eufórico, alzando la Supercopa tras destrozar el equipo de Hansi Flick al Real Madrid por segunda vez en dos meses y medio.

Hace un año, el Barça estaba en crisis. Xavi Hernández era más problema que solución y el curso acabó muy mal. Con suspenso. El actual, de momento, es una montaña rusa. Con Hansi Flick como capataz, Laporta ya tiene la Supercopa y quiere más. Tal vez la Liga. O la Champions. El Barça de Flick comenzó como una moto y luego gripó. Necesitaba un reset y ha comenzado 2025 a lo grande. El máximo dirigente puede soñar a lo grande.

El contrato con Nike

Laporta tendrá ahora unos día de tranquilidad. 2024 terminó con la renovación del contrato de Nike y una generosa comisión a Darren Dean. También con la negativa inicial de la Liga y la RFEF de validar las inscripciones de Dani Olmo y Pau Víctor hasta final de temporada, resueltas sobre la campaña, tras la cautelar del CSD.

Laporta se abraza con Hansi Flick tras la victoria del Barça en la Supercopa

Laporta se abraza con Hansi Flick tras la victoria del Barça en la Supercopa EFE

El club, como en muchas otras ocasiones, está en manos del equipo. Laporta, eso sí, confía plenamente en Hansi Flick, un técnico recomendado por otro intermediario amigo: Pini Zahavi. Así gestiona el abogado barcelonés un club que factura 800 millones de euros anuales.

Las dimisiones

Laporta, cada vez más presidencialista, resiste ante todo y ante todos. En su segundo mandato han dimitido ya tres directivos muy importantes: Jordi Llauradó, responsable del Espai Barça; Eduard Romeu, vicepresidente económico y Juli Guiu, vicepresidente de marketing. 

Un vistazo de la infraestructura interna del nuevo Camp Nou (3)

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Llauradó abandonó el barco por sus discrepancias con el nuevo Espai Barça y la elección de Limak Construction, Romeu optó por emprender una nueva aventura y Guiu se marchó molesto con el nuevo acuerdo del club con Nike. Sonada también fue la renuncia de Ferran Reverter, CEO del Barça, y, después, de Maribel Meléndez, máxima ejecutiva.

Florentino Pérez

Desactivada la oposición, Laporta está ahora en guerra con muchos clubes españoles, molestos con la resolución del CSD. Pero al presidente del Barça le preocupan mucho más las batallas internas, sobre todo ahora que comparte intereses con Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, en la búsqueda de nuevos recursos.

Los jugadores del Barça celebran el doblete de Raphinha en la final de la Supercopa contra el Real Madrid

Los jugadores del Barça celebran el doblete de Raphinha en la final de la Supercopa contra el Real Madrid FCB

El Real Madrid sigue siendo el gran rival del FC Barcelona en el campo, pero no en los despachos. En los últimos tres años y medio, el club madridista ha ganado 11 títulos con Laporta en la presidencia del club azulgrana. Cuatro suma ya el Barça: una Copa del Rey, dos Supercopas de España y una Liga (un título con Koeman, dos con Xavi y uno con Flick).

Araujo y la Juventus

Laporta, intenso como pocos dirigentes, no descarta más sorpresas en enero. Con la regla del 1:1, el Barça tiene ahora mucho más margen de maniobra para fichar a un futbolista importante, sobre todo si Ronald Araujo se va a la Juventus.

Araujo, contra el Real Madrid

Araujo, contra el Real Madrid EFE

El Barça no tiene prisa por vender a Araujo, y menos ahora que Iñigo Martínez estará cinco meses de baja por una lesión muscular. Si finalmente se cierra esta operación, Laporta y su director deportivo, Deco, podrían abordar el fichaje de Marcus Rashford u otro crack. Ni que sea por un días, el Barça y su presidente tendrán unos días de gloria, convencidos todos de que Hansi Flick ha sido la mejor apuesta en un club que vive al borde de un ataque de nervios.