El Barça tiene que reinventarse. Ya no puede hacer grandes fichajes y necesita fórmulas imaginativas para seguir siendo competitivo. Con una deuda superior a los 1.200 millones de euros y la masa salarial excedida, Joan Laporta y su director deportivo, Deco, tendrán que hacer malabares en verano para terminar el curso con números verdes y tener una plantilla competitiva y equilibrada. Una plantilla que tendrá un nuevo líder, tras la marcha de Xavi Hernández.
Deco, un ejecutivo muy pragmatico y calculador, tiene claro que el Barça deberá vender antes de comprar. El director de fútbol mira a las categorías inferiores y, sobre todo, al filial y se ilusiona con la proyección de algunos futbolistas. Tras la eclosión de Lamine Yamal y Pau Cubarsí, Deco está convencido de que Héctor Fort puede relevar perfectamente a Marcos Alonso.
Esperando al Bayern
El máximo ejecutivo deportivo del Barça encuentra muchas más soluciones. Nadie cuestiona que Cubarsí tendrá continuidad en el primer equipo y que, como mínimo, saldrá un defensa. Laporta quiere retener y renovar a Ronald Araujo, pero el presidente azulgrana podría cambiar de opinión si finalmente el Bayern presenta una oferta de 100 millones de euros por el jugador uruguayo.
Laporta prefiere vender a Jules Koundé, por quien el Barça podría ingresar más de 60 millones de euros. Posiblemente, necesitará más dinero para cuadrar sus cuentas antes del 30 de junio.
Christensen e Iñigo Martínez
Andreas Christensen e Iñigo Martínez tampoco tienen garantizada su continuidad en el Barça. El futbolista danés podría ser vendido por 30 millones de euros y al central vasco se le facilitaría su salida si un club asume su ficha: unos nueve millones de euros.
La prioridad de Laporta y Deco, sin embargo, pasan por ingresar unos 100 millones de euros antes del 30 de junio. Más allá de Araujo y Koundé, el Barça también ha puesto en venta a Raphinha, un delantero con un gran cartel en Inglaterra.
Negociaciones abiertas
A la espera de ofertas, Deco mantiene abiertas varias negociaciones. El asunto más importante es el del mediocentro. El director de fútbol asume que el Barça necesita un futbolista de primer nivel, tras el flojo rendimiento de Oriol Romeu, por quien se pagaron 3,4 millones de euros.
Deco también busca un extremo para la banda izquierda, pero antes deberá resolver el fichaje de Joao Félix o una nueva cesión. Y, por supuesto, deberá pronunciarse sobre el regreso de Ansu Fati. El delantero africano quiere jugar en el Barça la próxima temporada, pero sus planes no cuadran con los del club.
Frenkie de Jong y el United
El Barça también espera noticias de Frenkie de Jong. El centrocampista neerlandés ha rechazado la primera oferta de renovación y en el club contemplan su traspaso si llega una buena oferta. Hace dos años, el Manchester United estaba dispuesto a pagar 80 millones de euros, pero el futbolista no quiso irse del Camp Nou.
Laporta y Deco contemplan muchos escenarios. Muchas operaciones. Ningún futbolista es intocable, pero hay jugadores que tienen un relevo en la plantilla o en las categorías inferiores y otros que no. Y donde el Barça va más sobrado de talento es en defensa.
Próximos movimientos
Pau Cubarsí simboliza el futuro. Es una mezcla de Puyol y Piqué. Tiene una buena salida del balón, anticipación y es contundente. "Cuando Cubarsí tiene la pelota, estoy muy tranquilo", dice Xavi. Faye, zurdo, es el complemento ideal. Es más físico y debe mejorar algunas lagunas de concentración. Con ellos en forma, Deco está más tranquilo. Cualquier baja en defensa será menos dolorosa en un Barça que debe calcular perfectamente todos sus movimientos en el próximo mercado de verano.