Bombazo informativo de última hora. El FC Barcelona acaba de anunciar la marcha de Mateu Alemany. El director de fútbol ha pedido terminar su etapa en el club y dejará la entidad de forma oficial el próximo 30 de junio. Como Barça TV. A pesar de ello, ha llegado a un acuerdo amistoso con el Barça para ayudar al club hasta el cierre del mercado de fichajes de verano, que acaba el 1 de septiembre.
Mateu tiene contrato con el Barça hasta el 30 de junio de 2024 aunque no queda claro si se trata del acuerdo original o es desde hace relativamente poco tiempo. Hace unos meses se filtró que terminaba su contrato en 2023, pero poco después Culemanía pudo confirmar que tenía un año más de contrato. Algunas informaciones apuntan que se le renovó en secreto para frenar rumores, especualciones y polémicas. Sin embargo, Mateu mantenía unas dudas que le han llevado a querer salir del Barça, aunque la versión oficial es que ha recibido una oferta irrechazable del Aston Villa de su amigo Unai Emery, con quien coincidió en Valencia. ¿Será tan solo un tema de dinero? Parece ser que no.
Al parecer hay muchos factores que pueden haber conducido a esta situación. Culemanía ya avisó hace tiempo que Mateu estaba muy solo en el Barça y que a menudo había tenido injerencias desde otras áreas del ámbito deportivo. Tanto de la directiva, empezando por el presidente Laporta y sus amigos representantes --Pini Zahavi, Jorge Mendes, etc.-- como desde el área ejecutiva, siendo la figura de Enric Masip una de las que más polémicas ha suscitado en este tiempo en su figura de asesor deportivo del presidente. Algunas fuentes aseguran que estaba "muy desgastado".
Injerencias y guerra con la Liga
Aunque mantiene una excelente relación con Xavi Hernández y el staff técnico, especialmente con Òscar Hernández, Mateu también ha tenido que lidiar con muchas tensiones por estar en medio del propio Laporta y el cuerpo técnico. Hasta el punto de que hace meses surgieron informaciones sobre que su persona de confianza en el equipo, Jordi Cruyff, tenía mejor sintonía con el staff que con el propio Mateu, cuya tarea siempre ha sido la de reordenar la plantilla del primer equipo en lo deportivo, pero muy especialmente en lo económico. Suyos han sido algunos de los mejores fichajes recientes que llegaron a coste cero, como el de Andreas Christensen.
Este último año, Mateu también ha estado en medio de una potente guerra mediática donde tampoco se sentía a gusto. Y es que Alemany siempre ha sido un hombre de la confianza de Tebas y suya era la labor de intentar buscar entendimientos entre el Barça de Laporta y la Liga. La misión se puso cada vez más complicada y su imagen, siendo el Barça el club más expuesto del mundo a los medios con diferencia, podía quedar dañada.
Fuga de talento
No ha sido así porque la inteligencia de Mateu Alemany, además de su sobresaliente trabajado realizado desde que llegó en 2021, le ha ayudado a ir solventado estos obstáculos. Sin embargo, el guirigall que se vive en el FC Barcelona es de dimensiones tan siderales que el director de fútbol, como tantos otros, ha decidido ahuecar el ala.
Hay que recordar que Mateu no es el único alto cargo que decide hacer las maletas dentro del Barça de Joan Laporta. Figuras de renombre como Jaume Giró o Ferran Reverter también decidieron salir cuando detectaron algunas prácticas con las que no se sentían a gusto. Desde la salida de Reverter, el Barça sigue sin director general y ahora se queda sin director de fútbol.
Tampoco aguantó Ramon Planes, una figura clave para el departamento de fichajes durante su paso por can Barça. En el caso de Planes, ahora en el Betis, sus diferencias no fueron tanto con Laporta sino con Xavi.
Curiosamente, uno que antes estaba en el Betis, Antonio Cordón, es el principal favorito para ocupar la vacante de Mateu. Pero, más allá de quien venga, la realidad es que hay una preocupante fuga de talento en un club que desde dentro definen como "en construcción" pero que desde fuera parece estar en descomposición.