A falta de dos días para el clásico, Joan Laporta ha vuelto a utilizar los canales oficiales del club para pedir ayuda a la afición de cara al clásico de este domingo en el Camp Nou. Lo ha hecho manteniendo su discurso de los últimos días, al señalar que existe una campaña de acoso y derribo contra el Barça para intentar desestabilizarlo ahora que empieza a arrancar en lo deportivo.
El discurso de la campaña de desestabilización
"Culés, este domingo tenemos un gran partido y pido que vengáis a animar al equipo más que nunca, porque tenemos una gran oportunidad de ganar la Liga", empieza el mensaje institucional del presidente, que no ha dudado en arremeter contra aquellos que, según él, están haciendo todo lo posible por hacer descarrilar al Barça y alejarlo de sus objetivos esta temporada 2022-23.
“La campaña que estamos sufriendo no es por casualidad, lo sabéis todos", ha señalado en relación al Barçagate de Enríquez Negreira. "Tiene como objetivo, a corto plazo, desestabilizar al equipo, y a medio plazo controlar el Barça, quedárselo. Tendré tiempo para explicaros quién, por qué y cómo quieren orquestar esta campaña. No tengáis ninguna duda de que nos defenderemos. Y no solo nos defenderemos, atacaremos”, ha continuado.
“Ahora debemos estar concentrados en animar al equipo este domingo porque, como os he dicho, el primer objetivo que tienen es desestabilizarnos. Hay que centrarse en animar a nuestros jugadores y entrenadores, para que ganen el partido", hace hincapié el presidente.
Mensaje de ánimo para el barcelonismo
Y ha finalizado su mensaje institucional con una llamada a la unión por parte del barcelonismo, a fin de afrontar con optimismo el partido trascendental de este domingo. "Hemos de estar centrados en otros aspectos que puedan distraer a nuestros jugadores. Animemos al Barça porque queremos al Barça”, concluye.
Las palabras de Laporta, orientadas a insuflar ánimo a todos los culés en un momento delicado a nivel de imagen, siguen sin responder a las preguntas principales que se derivan del Barçagate de Enríquez Negreira. El máximo mandatario azulgrana, de hecho, aún no ha dado una fecha para la rueda de prensa en la que deberá ofrecer explicaciones para intentar aclarar la polémica.