Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, aseguró hace un año que la recuperación económica del Barça se aceleraría a partir del 30 de junio de 2023. Argumentaba entonces el máximo dirigente que el club se ahorraría algunas fichas millonarias, como las de Gerard Piqué, Sergio Busquets –si renueva lo hará a la baja—y Memphis Depay. Sin embargo, las previsiones de Laporta chocan con el próximo traslado del equipo a Montjuïc, que comportarán unas pérdidas de 93 millones de euros, según reconoce el mismo presidente.
El Barça cambiará el Camp Nou por el Olímpic Lluís Companys dentro de seis meses. El cambio preocupa mucho a la junta directiva. Más allá de su impacto económico, en el club asumen el malestar de muchos socios y abonados. De los 80.000 socios con asiento, solo 44.000 tendrán una localidad en Montjuïc. Otro problema serán los accesos.
Problemas de movilidad
Laporta prevé muchos problemas de movilidad. El Barça lamenta que los socios que tienen un aparcamiento en las instalaciones del Camp Nou no podrán estacionar sus vehículos en las inmediaciones del estadio olímpico. Habrá autobuses lanzaderas desde la plaza d’Espanya, pero en el club temen muchos problemas para acceder y evacuar el estadio. Ya los hubo con el Espanyol, con asistencias media de 25.000 espectadores.
El presidente del Barça informó la pasada semana de que el primer equipo regresará al Camp Nou en noviembre de 2024. A partir de entonces, el aforo del estadio será de unos 70.000 espectadores y el club espera terminar todas las obras en 2026.
El futuro Camp Nou
El futuro Camp Nou tendrá 105.000 localidades, todas cubiertas, y el Barça contempla un importante aumento del precio de los abonos.
Las obras se intensificarán en verano, con el derribo de la tercera grada, y la construcción de una totalmente nueva y simétrica. También habrá dos anillos de palcos. En total, el Barça espera ingresar más de 200 millones de euros por temporada.
Busquets y Memphis
El Barça, paralelamente, espera recortar su masa salarial. Antes aspira a liquidar el actual saldo negativo, de unos 30 millones de euros, con el Fair Play Financiero. El club está a la espera de que Sergio Busquets se pronuncie sobre su futuro. Si opta por seguir en el Barça, recibirá una oferta de renovación a la baja por una temporada.
La dirección deportiva azulgrana también contempla la salida de Memphis Depay, que acaba contrato el 30 de junio de 2023. El delantero neerlandés cobra algo más de 10 millones de euros brutos.
Piqué y Alba
El club, que la próxima temporada se ahorrará la ficha de Gerard Piqué tras avanzar su retirada el defensa, podría negociar con Jordi Alba un acuerdo amistoso para acelerar su salida del Barça. El defensa tiene contrato hasta junio de 2024.
Los fichajes más urgentes serán los de un mediocentro, sobre todo si Sergio Busquets se va, y un lateral derecho que sustituya a Bellerín en verano.