El Barça sigue estando maniatado por el Fair Play Financiero. La plantilla del primer equipo sigue teniendo una masa salarial demasiado alta. Joan Laporta prometió que una de sus grandes prioridades sería reducirla, pero la realidad es que los fichajes de Lewandowski, Raphinha, Koundé, Kessié, Christensen, Marcos Alonso y Bellerín dispararon en 100 millones los sueldos, tras activar cuatro palancas que solucionaron los problemas económicos a corto plazo.

De cara a este mes de enero, y en especial cuando empiece el nuevo ejercicio, el FC Barcelona necesita desprenderse de algunos contratos muy elevados que, como mínimo, supongan un ahorro superior a 50 millones de euros. Está obligado a hacerlo, siempre y cuando desee cumplir con promesas como las que le hizo a Gavi, y con renovaciones abiertas de par en par como la de Alejandro Balde.

Ronald Araujo y Gavi se quedan colgados

El club azulgrana, a día de hoy, no puede dar a Gavi dorsal del primer equipo por exceder los límites del Fair Play Financiero. El centrocampista de Los Palacios mantiene ficha del filial. De hecho, sigue jugando con el 30 a la espalda como ya hiciera el pasado curso. Está a la espera de que le hagan un hueco en el primer equipo para vestir el número seis, cosa que en teoría debe suceder este mismo invierno. Y que si no hay salidas y/o rebajas salariales, será imposible.

Araujo y Gavi, celebrando un gol con el Barça, durante una victoria en el Camp Nou / FCB

Araujo y Gavi, celebrando un gol con el Barça, durante una victoria en el Camp Nou / FCB

El oscuro panorama afecta también a jugadores como Ronald Araujo, Marcos Alonso, Sergi Roberto, Ousmane Dembelé y Frenkie de Jong. El Barça, sin ir más lejos, todavía no ha recibido el visto bueno de la Liga al nuevo contrato del central uruguayo --que se firmó hace ya varios meses-- y asume que el acuerdo cerrado con Gavi puede ir con los mismos derroteros.

Casos distintos entre las futuras renovaciones

La prioridad es solucionar este problema para cumplir con las renovaciones ya pactadas y anunciadas a todos los efectos, y después cocinar --aunque sea a fuego lento-- la de Alejandro Balde. La entidad culé desea renovarle hasta junio de 2027, y lo cierto es que hay muy buena sintonía entre las dos partes. Algunas fuentes incluso aseguran que un principio de acuerdo verbal.

Sobre Marcos Alonso y Sergi Roberto, la intención es extenderles el contrato uno o dos años más, al tratarse de jugadores que cumplen en varias posiciones y que, además, son de los que menos cobran de la plantilla. En lo referente a Ousmane Dembelé, cabe recordar que tiene contrato vigente hasta 2024, y que además puede marcharse este próximo verano por apenas 50 millones de euros de cláusula. Es uno de los favoritos de Xavi, y además está cuajando un buen Mundial. El Barça intentará renovarle una temporada más con el salario actual, prometiéndole que más adelante le subirá los emolumentos.

Dembelé y Frenkie de Jong, celebrando el golazo contra el Athletic / EFE

Dembelé y Frenkie de Jong, celebrando el golazo contra el Athletic / EFE

Frenkie de Jong es un caso distinto, pues se le quiere renovar pero a la baja, con la voluntad de que acepte la reducción salarial de una vez por todas. Si el tira y afloja continúa y el futbolista se mantiene en sus trece, el Barça no descarta volver a fomentar su traspaso en los próximos mercados de 2023, a fin de sacar una gran cantidad de dinero por su marcha y, a la vez, ahorrarse uno de los sueldos más altos de la plantilla.

Los traspasos serán las nuevas palancas

Laporta y Mateu Alemany saben que ya no podrán utilizar palancas como la de Barça Licensing & Merchandising (BLM) para realizar fichajes ni equilibrar el control económico de la Liga. Sin embargo, sí verán cómo el futuro adiós de Sergio Busquets y Jordi Alba, con toda probabilidad al término de esta temporada, ayudan a reducir notablemente la masa salarial.

Xavi Hernández, junto a sus jugadores, prepara un amistoso para el Barça / EFE

Xavi Hernández, junto a sus jugadores, prepara un amistoso para el Barça / EFE

 

Las posibles salidas de jugadores como Frenkie de Jong, Memphis Depay, Franck Kessié o incluso Ansu Fati --si no cumple con las expectativas esta campaña-- darían otro paso de gigante a la hora de cumplir con el Fair Play Financiero. La situación actual del Barça es muy delicada, pero el objetivo sigue siendo el mismo: solucionar los problemas económicos al mismo tiempo que se le brinda a Xavi el equipo más competitivo posible. ¿Será posible ese equilibrio durante mucho tiempo? ¿Volverá a ganar títulos el Barça a corto plazo? Sólo el tiempo tiene la respuesta.