La credibilidad e imagen de la FIFA se ha visto perjudicada en la última década a partir de los escándalos de sus dirigentes, como fue el caso de Joseph Blatter. Con la figura de nuevos dirigentes se espera dejar atrás una parte oscura del organismo del fútbol internacional, pero la presencia de Gianni Infantino no ha mejorado dicha situación. El actual presidente también ha estado involucrado en varios trapos sucios que siguen dejando por los suelos la reputación de la entidad.
La residencia en Qatar
El fanatismo de Infantino por el territorio de Oriente Medio ha despertado muchas dudas. No solo por su defensa total para la disputa de la cita mundialista del 2022, sino también por el hecho de contar con una residencia en dicho país. Hace poco que el mandatario de la FIFA fijo un domicilio en la ciudad de Doha, lo cual llama poderosamente la atención, debido a que ningún otro presidente había vivido en la sede de un Mundial más de un año antes de su celebración.
Esa situación provocó que muchos medios internacionales se hicieran preguntas acerca de los motivos que habían impulsado al ítalo-suizo a vivir en Qatar. Pero desde el organismo en cuestión no ofrecen ningún tipo de respuesta. Incluso el propio Blatter, expresidente de la entidad, llegó a declarar que “el lugar del presidente de la FIFA es donde está la sede, y está en Zúrich. Es desde allí desde donde debe dirigir la FIFA, no desde otra parte. No puedo decir que sea escandaloso, pero sí que es incomprensible”.
Los Panama Papers
Los Panama Papers, la mayor investigación periodística mundial sobre los negocios ocultos durante décadas, también tiene una vinculación con Gianni Infantino. Fue uno de los primeros trapos sucios relacionados al actual mandatario de la FIFA, siendo en su primer año como dirigente. Los documentos revelaron que la UEFA incurrió en tratos con empresas offshore con algunos de los imputados en los casos de corrupción del Mundial. Dichos contratos, que comprenden desde 2003 a 2006, están firmados por Infantino.
Sin embargo, el presidente del regulador del fútbol internacional y la UEFA negaron su implicación en semejante escándalo: “Estoy consternado y no aceptaré que ciertas áreas de los medios de comunicación pongan en duda mi integridad, especialmente dado que la UEFA ya ha revelado en detalle todos los hechos relacionados con estos contratos”.
Conspiración contra Blatter
Hace un par de años, en plena crisis por la pandemia, se dio a conocer a partir de la información de Neue Zürcher Zeitung y Le Monde que Infantino habría recurrido a un amigo magistrado suizo, Michael Lauber, para obtener información judicial sobre Joseph Blatter y Michel Platini, exmandatario de la UEFA. Una posible conspiración que pudo haber facilitado su acceso a la presidencia de la FIFA.
Es importante recordar que un año antes de dicha noticia, la fiscalía publicó un informe dirigido por el organismo de supervisión con 48 páginas en las que se acusa a Michael Lauber de "violar varios deberes del cargo" después de reunirse varias veces con el presidente de la FIFA entre 2016 y 2017. Una serie de encuentros que pudieron beneficiar los planes de Infantino.