El CSD aboga por el silencio ante la amenaza de huelga de la Liga

Situación delicada la que se presenta en la élite del fútbol español. La nueva Ley del Deporte afronta una semana determinante para ser tramitada, después de que varias modificaciones de su texto y enmiendas hayan propiciado una rebelión por parte de 39 de los 42 clubes de Primera y Segunda División. Ante la posibilidad --por remota que pueda parecer-- de que se dé una huelga en ambas competiciones, las partes implicadas abogan por el diálogo en unos días decisivos para acercar o distanciar aún más las posturas.

Desde la patronal de clubes, presidida por Javier Tebas, ya se ha convocado a los altos mandos de los equipos este jueves 27 de octubre. La asamblea general servirá para estudiar el escenario de la nueva Ley del Deporte, así como para establecer una toma decisiones sobre posibles movimientos. Dicha cumbre tendrá lugar dos días después del encuentro en la Comisión de Cultura y Deporte del Congreso de los Diputados, en el que se dará una sesión informativa sobre el nuevo texto de dicha legislación.

FC Barcelona y Real Madrid, como era de esperar, se mantienen al margen de las protestas del resto de clubes. Los cambios aplicados en la nueva Ley del Deporte benefician los intenciones continentales de Joan Laporta y Florentino Pérez, especialmente en lo que respecta a su participación en una hipotética Superliga Europea. Las tres enmiendas retiradas afectan a tres puntos concretos, cuya modificación es el objeto de crítica de la mayoría de equipos.

Javier Tebas y Florentino Pérez, dos figuras enfrentadas / CULEMANÍA

Javier Tebas y Florentino Pérez, dos figuras enfrentadas / CULEMANÍA

Las enmiendas de la discordia

El primero de los aspectos es la seguridad en la comercialización de los derechos de la competición. El nuevo contexto jurídico daría más libertad a la explotación comercial por parte de los clubes --algo que interesa a Laporta y Florentino Pérez--, lo que podría llevar a CVC Partners a la revisión de los contratos que tiene suscritos con la patronal. Y, por tanto, pondría en peligro los acuerdos a los que llegaron Javier Tebas, sus directivos y 39 de los clubes de la élite española con el fondo de inversión británico.

La segunda enmienda retirada es la posibilidad de que Liga y la Federación veten a clubes que participen en torneos como la Superliga, es decir, campeonatos no reconocidos a día de hoy por UEFA ni FIFA. El tercer punto extraído, por último, comprende la exigencia de un informe previo favorable de la patronal a los cambios normativos de la RFEF que puedan afectarla, algo que a partir de ahora ya no sería necesario. Los clubes contrarios a los intereses de Barça y Real Madrid han alzado la voz de protesta, aunque su prioridad es agotar las vías de diálogo con el Consejo Superior de Deportes (CSD) y el gobierno.

El CSD guarda la compostura

Desde el CSD se toman la situación con calma tensa. Saben de la amenaza de huelga general en el fútbol español, pero abogan por el silencio a la espera de cómo marchen las negociaciones. "No vamos a decir nada por ahora. Hay una parte que está diciendo muchas cosas públicamente y, a la hora de negociar, hay que hacerlo de otra manera", han remarcado a Culemanía fuentes internas del Consejo Superior de Deportes. "Vamos a guardar silencio, pero tendremos más información a lo largo de los próximos días".

Laporta y Florentino Pérez, dándose la mano tras una comida de directivas / Real Madrid

Laporta y Florentino Pérez, dándose la mano tras una comida de directivas / Real Madrid

Por el momento, los clubes ya han trasladado sus inquietudes sobre la nueva ley al ministro de Deporte, Miquel Iceta, para tratar de evitar consecuencias que dificulten el transcurso de las competiciones españolas. A nadie le interesa una huelga, y lo más probable es que el diálogo confluya en acuerdos a medio camino entre lo que piden unos y lo que defienden otros.

Este pasado fin de semana, durante las transmisiones televisivas de los partidos, la Liga incluyó en la parte superior de la pantalla el lema de Ley del Deporte para todos, una postura a la que se sumaron públicamente varios presidentes y directivos de Primera y Segunda como José Castro (Sevilla), Manuel Vizcaíno (Cádiz), Alfonso Fernández (Alavés), Quico Catalán (Levante), Francisco Canal (Osasuna) o Alfredo García (Granada), entre otros. Los próximos días serán clave para que, presumiblemente antes del jueves, pueda darse un acuerdo entre el gobierno y la patronal. Hasta que eso suceda, la sombra de una huelga general seguirá planeando sobre el fútbol español.