Joan Laporta se la juega. El presidente del Barça ya ha activado tres palancas, y no descarta nuevas operaciones económicas, para reflotar a un club con una deuda asfixiante y un equipo deprimido. Con la venta del 25% de los derechos de la Liga y el 24,5% de Barça Studios, el máximo dirigente se pone en manos de Xavi Hernández y sus futbolistas tras los sonados fichajes de Lewandowski, Koundé y Raphinha.
El Barça ha ingresado más de 500 millones de euros por los derechos televisivos de la Liga y 100 millones más por la venta del 24,5% de Barça Studios a socios.com. El presidente ha hipotecado muchos ingresos de los próximos años para reactivar a un equipo que la pasada temporada fracasó en España y en Europa. También tiene atada la venta de otro 24,5% de Barça Studios por 100 millones más.
Los casos del Milan y el United
Para evitar una posible sequía de títulos en los próximos años, similar a la que padece el Manchester United y sufrió el Milan, Laporta confía que el equipo solucione los males del club.
El primer objetivo de Laporta fue el fichaje de Erling Haaland, pero el Barça no pudo competir con el Manchester City ni el Real Madrid. El delantero noruego era la pieza que buscaba el presidente azulgrana para atraer a nuevos patrocinadores. Descartado Haaland, Laporta priorizó la contratación de Lewandowski, el delantero europeo con mejores números. Su amistad con Pini Zahavi, representante del futbolista, facilitó el fichaje del atacante polaco.
Más fichajes
Lewandowski era el gran reclamo, pero no el único. Tras los fichajes a coste cero de Kessié y Christensen, Xavi pidió mucho más y la dirección deportiva priorizó las contrataciones de Raphinha y Koundé. Es decir, un extremo con mucho desparpajo y pegada, y un joven defensa con mucho talento y proyección.
El Barça todavía tiene algunas operaciones pendientes. La más avanzada es la contratación de Marcos Alonso, por quien podría pagar unos ocho millones de euros.
De Jong, clave
El club azulgrana también está a la espera de resolver asuntos menos agradables, como las salidas de Braithwaite y Umtiti, mientras que Dest y Frenkie de Jong están en venta. Por el centrocampista neerlandés el Barça aspira a ingresar 80 millones de euros, pero el futbolista no está por la labor de irse a otro club. Descartado el Manchester United, De Jong estudia la propuesta del Chelsea.
El traspaso de De Jong facilitaría el fichaje de Bernardo Silva, el centrocampista más deseado por Xavi. El portugués es un futbolista muy ofensivo, con llegada, pero el Manchester City pide unos 80 millones de euros por él. Su incorporación cerraría un mercado muy movido en el Camp Nou, con Laporta apostando fuerte en la búsqueda de nuevos ingresos.