Más buenas noticias en el FC Barcelona. A falta de planificación inicial, la factoría Laporta se ha especializado en la generación de optimismo e ilusión a base de muchos fichajes y buenas nuevas que alivian el sufrimiento del seguidor culé en general y de la masa social en particular. La última gran novedad que ha podido conocer Culemanía consiste en la reducción de la deuda: pasa de los 1.350 millones heredados de la anterior junta directiva a los 1.200 millones actuales.
Esto ha sido posible gracias a la activación de las palancas económicas, que no solamente generan ingresos para poder fichar e inscribir a los nuevos jugadores, sino que también ayudan a aligerar cargas pesadas como la deuda. De los 767 millones ingresados a través de las denominadas palancas --las ventas del 25% de los derechos televisivos de la Liga a 25 años y del 24,5% de Barça Studios in eternum--, el club ha destinado 150 millones a reducir la deuda con los bonistas y con Goldman Sachs, que prestó 595 millones de euros al club en un crédito firmado hace un año.
Objetivo: reducir deuda a 600-700 millones
Además, en el seno de la entidad se muestran optimistas con la reducción de deuda a medio plazo: esperan que cuando se haya estabilizado el club, la deuda haya quedado reducida a unos 600 o máximo 700 millones de euros. Sigue siendo elevada en proporción a los 200 millones que en su día pretendía el ex vicepresidente económico Javier Faus, pero para una entidad destinada a generar unos 1.000 millones al año se considera una cifra asumible. Igualmente el club, aspira a eliminar la deuda en 10 años.
Uno de los elementos que ayudará en este recorte del 'debe' son 180 millones de euros destinados a las obras del Espai Barça. En cuanto se firme la financiación con Goldman Sachs, automáticamente se traspasarán de la deuda del club al nuevo plan de financiación de las obras. Con lo que la deuda ya se habrá reducido a unos 1.000 millones.
500 millones de tesorería
Pese a la citada rebaja de la deuda, el club mantiene una tesorería de 500 millones gracias a la venta de activos. El dinero de la primera palanca --una inyección líquida de 207,5 millones que computó, a nivel contable, como 267 millones-- sirvió para cerrar el ejercicio 2021-22 con beneficios de unos 100 millones de euros. Las últimas informaciones hablan de 98, para ser exactos, lo que revela que la entidad habría tenido unas pérdidas de 169 millones de euros sin esa primera venta del 10% de los derechos televisivos de la Liga.
La segunda y tercera palancas deben ayudar a generar beneficios durante la temporada en curso (22-23). Han entrado 400 millones más por derechos televisivos y otros 100 de Barça Studios. 500 kilos, en total, que computarán directamente en el balance de ingresos, que debe ser superior al de gastos para volver a cerrar el ejercicio con beneficios. Próximamente el club inyectará otros 100 millones más con la activación de la cuarta palanca.
Nuevos presupuestos
Las previsiones auguran un presupuesto de ingresos de 1.300 millones con las palancas y uno de gastos de unos 900 millones. De esta forma, el ejercicio actual se cerraría con números positivos por valor de 400 millones. Una cifra que serviría para devolver al club a fondos propios positivos.
Recordemos que la temporada pasada el club tenía un fondo de maniobra negativo de -451 millones. Esta cifra se ha reducido a -353 gracias a los 98 millones de beneficios del ejercicio 21-22. Si la entidad consigue 400 millones de beneficios este año, estaremos hablando de unos fondos propios de 47 millones de euros, en cifras que por ahora son meras estimaciones.
Estas son las cifras que desde el club han enviado a la Liga para que las valide y así poder inscribir a los nuevos fichajes antes del 13 de agosto, cuando se estrena el Barça en el campeonato doméstico. En la entidad culé reina el convencimiento de que el organismo que preside Javier Tebas no pondrá impedimentos y, tras hacer muchos cálculos, esperan tener un límite salarial de 680 millones.
Vuelve a subir la masa salarial
La mala noticia, y es que siempre tiene que haber alguna, es que la masa salarial ha vuelto a crecer. La operación salida está a medias y el club ya ha contratado a cinco jugadores nuevos, que se suman a las renovaciones. Se han invertido 240 millones en fichajes, entre pagos en fijos y en variables, desde que llegó Xavi al banquillo. Las estimaciones prevén un aumento de la masa salarial hasta los 620 millones entre sueldos y amortizaciones de fichajes. Al cierre del curso pasado, la cifra era de 560 millones, según aseguró el vicepresidente económico Eduard Romeu.