Decisión tomada en el seno del FC Barcelona. Tras haber activado la primera palanca económica para sanear las cuentas del club, la viabilidad de la segunda bombona de oxígeno ya está en marcha. El presidente Joan Laporta promovió la venta del 10% de los derechos audiovisuales procedentes de la competición de Liga a Sixth Street, una inversora que pagará 207,5 millones de euros a cambio de explotar el activo durante los próximos 25 años. CVC Partners llegó a postularse como una de las alternativas, pero la cúpula azulgrana la acabó desechando.
Mismo destino que el de Bank of America, que ofreció la misma cantidad que CVC --270 millones de euros-- en la mitad de tiempo --25 años, por los 50 que planteaba el socio de la Liga--. Laporta, que quiere seguir de la mano de Florentino Pérez en la cruzada contra Javier Tebas, mantiene la esperanza de cerrar un nuevo acuerdo con Sixth Street. En esta ocasión será por la venta del otro 15% de los derechos de TV, aunque el acuerdo aún no está cerrado y no se anunciará hasta la segunda quincena de julio.
CVC, una opción descartada por el Barça
Las preferencias de Laporta y los altos mandos culés han descartado a CVC de cualquier posible ecuación, pero eso no significa que el fondo no siga expandiéndose por todos los rincones del deporte en los que detecta vías de negocio. Ahora, ha decidido dar su primer paso en el mundo del tenis. Es por ello que está ultimando la compra del 20% de la WTA --Women's Tennis Association-- a cambio de 174 millones de euros, con el objetivo de combinar el circuito femenino con el masculino.
Así lo ha informado The Times, en una operación que podría gestarse a nivel oficial durante la reunión que tendrá lugar el próximo mes de septiembre --durante la celebración del US Open--, y que podría transformar definitivamente el tenis femenino. La junta de la WTA ya se reunió en los últimos días, durante los prolegómenos del Grand Slam de Wimbledon, para tomar una decisión al respecto.
La aspiración del tenis femenino es conseguir la igualdad de premios con el circuito masculino, y se espera que el acuerdo con el fondo de inversión pueda facilitar un avance único en la historia de este deporte. El fondo CVC ya se interesó el año pasado por irrumpir en el mundo del tenis, con la propuesta de crear una única organización que aglutine todas las secciones y circuitos del tenis. Dicha oferta pasaba por inyectar 600 millones de dólares --493 millones de euros-- a una gestora que llevase las riendas de todo, a cambio de recibir un paquete del 15% de la misma, y después de valorar el 100% del grupo en 3.287 millones de euros.
Una organización al estilo FIFA o UEFA
One Tennis sería el nombre hipotético de la compañía, y concentraría los derechos audiovisuales, comerciales y de datos de ambos campeonatos --masculino y femenino--. Al margen quedarían los cuatro Grand Slam, cuya gestión es autónoma. CVC, en definitiva, sigue expandiéndose en la industria del deporte pese a llevarse algún que otro chasco, como el del FC Barcelona. Además de su presencia en la Liga, para la que inyectará 1.994 millones de euros en el fútbol profesional español, el fondo potenciará este año el fútbol francés con una inversión de 1.500 millones de euros en la Ligue 1.
Tras su exitoso paso por la Formula 1 y la Moto GP, CVC Partners cerró en marzo de 2021 la compra del 14,3% del Seis Naciones de rugby a cambio de 426 millones de euros. Antes, firmó un acuerdo con la Federación Internacional de Voleibol --FIVB-- para impulsar la proyección de esta disciplina deportiva con una inversión de 248 millones de euros. El Barça de Laporta no quiere impulsar nuevos negocios con CVC, pero eso no significa que el resto del deporte internacional no los haga. Y, paso a paso, la entidad de capital de riesgo gana cada vez más protagonismo.