El FC Barcelona sigue recogiendo pequeños frutos de diferentes contratos. La entidad culé no atraviesa su mejor momento económico, por lo que cada ingreso representa un alivio para la directiva de Joan Laporta. En este sentido, la habilidad de Mateu Alemany en los negocios ha permitido que el club pueda asegurar hasta un mínimo de seis millones de euros por un cedido. En concreto, se trata de Francisco Trincao.
El extremo portugués fue cedido el verano pasado a los Wolverhampton Wanderers del fútbol inglés. En ese acuerdo, el Barça dejó una opción de compra no obligatoria por un total de 30 millones de euros. Sin embargo, si dicho equipo no ejerce esa cláusula, entonces estarán en la obligación de pagar seis millones de penalización. La cesión expira el próximo 30 de junio, por lo que en pocos días se tendrá que empezar a realizar ese pago.
Si bien Trincao ha gozado de una buena cantidad de minutos en la Premier League, la realidad es que los Wolves no están interesados en pagar esa opción de compra por 30 kilos. La única forma en la que podía darse ese escenario es por un hipotético trueque que se estuvo comentando con Adama Traoré, pero la directiva de Laporta no está interesada en extender la permanencia del canterano en el equipo azulgrana. Dicha situación provoca que el FC Barcelona reciba esa inyección de dinero a partir del 30 junio. Aunque también implica que deberán gestionar la situación del joven atacante, que quiere sumar protagonismo en un equipo.
Las opciones de Trincao sobre la mesa
De momento, se espera que el luso forme parte de las primeras sesiones de la pretemporada de Xavi Hernández. La intención del club azulgrana es traspasar al futbolista en cuestión, aunque el entrenador egarense podría ponerlo a prueba para tomar una decisión definitiva en el mercado de fichajes. Cabe recordar que la posible salida de Dembelé dejará un vacío inmediato en la banda derecha del ataque.
Por otra parte, Trincao tiene sobre la mesa una propuesta del Sporting de Lisboa. El equipo de la capital portuguesa quiere contar con los servicios del jugador de 22 años en calidad de cedido, pero en el FC Barcelona esperan involucrar una cláusula de compra para el verano del 2023. Las próximas semanas pueden ser claves para que las negociaciones avancen por buen camino.