El Chelsea FC ha recibido una oferta estremecedora. La entidad inglesa está cerca de pasar a ser parte de un nuevo propietario, después que Roman Abramovich decidiera dar un paso al costado debido a las presiones existentes en el gobierno británico por su relación con Vladimir Putin, presidente del país ruso. Desde entonces han existido algunos interesados en adquirir el mencionado equipo, pero ha sido Jim Ratcliffe el que ha causado mayor revuelo por su millonaria propuesta.
Ratcliffe es un multimillonario británico, propietario de la compañía petroquímica INEOS. En un comunicado de dicha empresa expresaron que han realizado una oferta formal por 5.000 millones de euros para adquirir el club londinense. Del mismo modo, explican que “se han comprometido 3.000 millones de euros para Charitable Trust, para apoyar las víctimas de la guerra, y 2.000 millones de euros para invertir directamente en el club durante los próximos 10 años. Esta es una oferta británica, para un club británico”.
Diferentes fuentes aseguran que se trata de la propuesta económica más elevada de las que se han presentado en las oficinas del Chelsea FC. La oferta para seducir lo suficiente a Abramovich, que no ha estado del todo convencido del interés de otros millonarios. Cabe destacar que Ratcliffe ya está involucrado en el mundo del fútbol, siendo el dueño del Niza de la Ligue 1.
El Chelsea puede resucitar
Una compra inmediata por parte del grupo presidido por Ratcliffe puede devolverle alas al proyecto de Thomas Tuchel. Actualmente hay varios jugadores que están haciendo sus maletas para dirigirse a otros clubes en el próximo verano, como es el caso de Andreas Christensen (FC Barcelona) y Antonio Rudiger (Real Madrid), además de otros que también suenan para despedirse en los próximos meses: Romelu Lukaku.
Dicha situación puede representar un problema para el FC Barcelona, tomando en cuenta que hay un par de jugadores que han estado durante meses en la órbita del elenco inglés. En concreto se trata de Gavi y Ousmane Dembelé. Ambos han recibido el interés por parte de dicho club, que podría tener nuevamente fuerza económica para encarar nuevos fichajes. El canterano tiene una baja cláusula de rescisión (50 millones) y el extremo francés quedará libre en verano, aunque la entidad culé quiere renovar su contrato.