La semana empezó caliente con la filtración de los primeros audios entre Gerard Piqué y Luis Rubiales, y sigue ardiendo con la aparición a cuentagotas de nuevas conversaciones comprometidas entre ambos. Lo último que ha desvelado El Confidencial es la queja del central azulgrana al presidente de la Federación Española en 2019, justo después de un partido contra la Real Sociedad (2-2) y justo antes de un clásico contra el Real Madrid.
El zaguero catalán se lamentó desde San Sebastián por un penalti no pitado en el Reale Arena, y Rubiales le preguntó cómo estaba a través de Whatsapp. Fue entonces cuando Piqué se quejó del videoarbitraje y el máximo mandatario de la RFEF, viendo el malestar del jugador culé, le dejó claro que el VAR está para ser imparcial y no beneficiar ni perjudicar a nadie.
El árbitro de aquel Real Sociedad-Barça era Alberola Rojas, quien no consideró penalti ante un agarrón claro a Piqué dentro del área y, desde el VAR, tampoco lo entendieron como un error grave, por lo que no se indicó nada. El compromiso terminó con empate a dos en Anoeta. Para colmo, uno de los goles de la Real Sociedad había llegado penalti en una acción similar, mediante un agarrón de Busquets que el árbitro sí consideró penalti. La comparación entre ambas acciones cabreó a los blaugrana y en especial a Piqué, el protagonista de una última jugada que habría decantado los tres puntos.
La conversación Rubiales-Piqué
"¿Cómo estáis?", preguntó Rubiales a Piqué por Whatsapp, a lo que Piqué contestó lo siguiente: "Jodidos, hoy la han liado". A continuación, el presidente de la Federación preguntó: "¿Qué ha pasado, que no he visto lo del VAR?". Gerard Piqué, entonces, fue muy claro en sus explicaciones: "Pues que no han consultado el VAR y era penalti clarísimo. Y los del VAR tampoco han dicho nada. Tendrían que haber avisado al árbitro. Sobre todo si pitas el de Busi en la primera parte", comentó el central azulgrana.
Minutos después, Rubiales envió un audio lamentando lo sucedido, pero asegurando que el VAR es una herramienta transparente: "¿Sabes lo que pasa, Geri? Que o es clamoroso o... yo no lo he visto. Palabra de honor que yo no lo he visto. Estoy en Sevilla y... bueno, que en Sevilla también hay tele, pero que no lo he visto. Sé que os han pitado uno dudoso en contra, que si es dudoso no entran ni para bien ni para mal, y sé que no han pitado uno, un agarrón a ti, me han dicho. Pero los agarrones también, o es muy claro o tampoco entran. Pero bueno, lo veré después. Oye, si se han equivocado... Tú sabes que estando yo por medio no hay ni ganas de perjudicar ni de beneficiar a nadie, ¿sabes?".
Días antes de un clásico
La cuestión es que, cuatro días después de esa polémica, Barcelona y Real Madrid se enfrentaron en el Camp Nou, en un clásico que debía haberse disputado en octubre pero que fue aplazado por las protestas del movimiento Tsunami Democrátic. El compromiso se disputó finalmente el día 18 de diciembre, terminó 0-0 y el Real Madrid reclamó también dos penaltis a Varane, uno por agarrón de Rakitic y otro por un plantillazo de Lenglet, que no se pitaron.