El Manchester City es uno de los clubes que ha cambiado su realidad en poco más de una década. De ser un equipo de bajo perfil en la Premier League a conquistar dicho torneo y estar a las puertas de conquistar la Champions League. Ese cambio radical en su historia se debe esencialmente a la entrada el jeque Mansour Bin Zayed Al Nahyan, el cual ha dotado de recursos ilimitados a la mencionada entidad. Sin embargo, nuevos documentos detallan la financiación que ha tenido el club con Abu Dabi, lo cual representa una violación al Fair Play Financiero de la UEFA.
La revista alemana Der Spiegel ha desvelado unos nuevos documentos investigados por Football Leaks y compartidos por InfoLibre, los cuales detallan que el millonario equipo inglés fue financiado por la Autoridad de Asuntos Ejecutivos (siglas EAA en inglés), una agencia del Gobierno de Abu Dabi. La investigación explica que el Manchester City violó las normativas internacionales al realizar numerosos pagos que ascienden a millones de euros a agentes de futbolistas y, a su vez, por la inyección de capital en concepto de patrocinio. Del mismo modo, realizaron de forma secreta un acuerdo triangular que involucraba a un jugador español menor de edad.
Los altos ingresos de patrocinio
Uno de los aspectos claves que se señala en la investigación es los altos ingresos que ha registrado el Manchester City como patrocinio. El jeque Mansur Bin Zayed Al Nahyan, que además es miembro de la familia gobernante de Abu Dabi, se ha encargado de aprovechar esa posición para filtrar de recursos económicos al club inglés y así dar el salto a la élite del fútbol europeo. Esos recursos provienen directamente del jeque Mansour Bin Zayed Al Nahyan, que es el príncipe heredero de Abu Dabi.
Todos esos millones se camuflaron como ingresos por patrocinios. La información describe que el dinero era transferido a diferentes empresas con sede en Abu Dabi, lo que terminaba reflejando unas ganancias irreales en el área de marketing. De esa forma, la entidad de la Premier League ha sido capaz de reponerse ante temporadas con pérdidas económicas, aunque eso evidentemente representa una clara violación del Fair Play Financiero de la UEFA.
El organismo regulador del fútbol europeo ha tratado de castigar esa situación con la entidad inglesa, pero sus esfuerzos han sido insuficientes. Hay que recordar que la UEFA intentó sancionar al City con dos temporadas fuera de las competiciones europeas, pero recurrieron al TAS (Tribunal de Arbitraje para el Deporte) y evitaron esa bala. A día de hoy quieren fortalecer esas normativas con el nuevo Fair Play Financiero, pero queda la duda si realmente tendrán la capacidad de superar ese muro que proponen los clubes-Estado.
Actualmente el Manchester City es el club con la plantilla mejor valorada. Según las cifras otorgadas por el portal de Transfermarkt, el equipo dirigido por Pep Guardiola tiene una cotización en el mercado de 959 millones de euros. Una cifra abismal que se explica a partir de los descomunales esfuerzos económicos realizados en varios de los mercados de fichajes. Esa financiación de Abu Dabi es lo que ha facilitado su presencia entre los grandes del viejo continente.
Jaume Roures, gran implicado
Por otro lado, de acuerdo a la documentación, la empresa Mediapro de Jaume Roures está salpicada en parte de la controversia. En el mencionado acuerdo triangular estuvo presente el grupo audiovisual, quienes hicieron el papel de intermediarios en la operación del Manchester City con Brahim Díaz durante el 2013. Por aquel entonces el atacante se estaba formando en las categorías inferiores del Málaga CF. La entidad española firmó un acuerdo con Mediapro, en donde esta última se comprometió a pagar 360.000 euros a nombre del club de la Premier League, como adelanto de una indemnización por la formación que le dieron al joven delantero.
Ese monto en especifico solo podía darse cuando Brahim Díaz cumpliera los 16 años, por lo que el City estaba realizando, a través de Mediapro, un anticipo para tener los servicios del mencionado futbolista. Cabe destacar que en esa operación también estuvo involucrado Pere Guardiola, que fue hasta el 2019 el representante del atacante español con su empresa Media Base Sports, la cual pertenece a Imagine Media, el grupo en el que está integrado el grupo audiovisual de Roures.