Joan Laporta, presidente del FCBarcelona, estaba muy molesto tras la derrota contra el Eintracht. También Xavi. Y los jugadores. Dolió la eliminación y la masiva presencia de aficionados del Eintracht en el Camp Nou. Muchos socios se quejaron amargamente durante y después del partido y la grada de animación se declaró en huelga durante 10 minutos. Los primeros de la segunda parte.
Los aproximadamente 700 aficionados del Barça que se situaron en la zona acotada para la grada de animación se retiraron de sus localidades al acabar la primera parte. Y no regresaron con el inicio de la segunda. Con todos los asientos vacíos, quisieron plasmar su decepción y enfado por la asistencia de unos 20.000 aficionados del Eintracht en el estadio.
Regreso a las localidades
Los socios de la grada de animación regresaron a sus localidades en el minuto 10 de la segunda parte. Hasta entonces, habían competido con los alemanes para apoyar a su equipo. Y regresaron con sus cánticos habituales. El más coreado: Un dia de partit.
La grada de animación está formada por cuatro colectivos independientes: Almogàvers, Front 532, Nostra Ensenya y Supporters Barça.
Xavi y Laporta, molestos
"Ha sido un espectáculo bochornoso. Parecía que jugáramos en un campo neutral. La venta de entradas se ha gestionado muy mal", recalcaba un socio de la grada de animación. "Esto no se puede repetir. Ha sido lamentable", añadía.
Xavi, en rueda de prensa, admitió que los futbolistas del Barça se sintieron muy incómodos en el Camp Nou. "Ha sido un error de club", dijo. Y el presidente, Joan Laporta, admitió: "Es una vergüenza lo que ha pasado. Queremos reunir toda la información para ver que no suceda más y pedimos disculpas a nuestros socios".