El FCBarcelona invertirá 1.500 millones de euros, más los pertinentes intereses, en el Espai Barça, que contempla la reforma del Camp Nou y la construcción de un nuevo Palau Blaugrana, el Palau Petit y una pista de hielo. Hace 64 años, el club entró en una gran crisis deportiva y económica pocos años después de inaugurar el Camp Nou.
Diseñado por el arquitecto Francesc Mitjans, el coste del Camp Nou fue presupuestado en 67 millones de pesetas --poco más de 400.000 euros-- pero finalmente ostó 288 millones de pesetas, algo más de 1,7 millones de euros, y el club quedó muy tocado económicamente. Hasta entonces, el Barça había ganado seis títulos de Liga. Los últimos cinco, en los últimos 12 años: 1945, 1948, 1949, 1952 y 1953.
La construcción del Camp Nou
El campo de Les Corts, con capacidad para 60.000 espectadores, se había quedado pequeño. Las avalanchas eran habituales y el Barça quiso construir un estadio mucho más seguro, mas grande y moderno. El Camp Nou fue un estadio vanguardista con una capacidad inicial para 93.000 espectadores.
El Camp Nou fue construido durante el mandato de Francesc Miró-Sans. Entonces, el Barça vivía una época de gran esplendor, con Kubala como estrella. El equipo azulgrana todavía ganó dos títulos de Liga más poco después de su inauguración el 24 de septiembre de 1957. El Barça fue campeón en 1959 y 1960. Luego llegó la gran crisis.
La Liga de Cruyff
El Barça estuvo 14 años sin ganar la Liga. Entre 1960 y 1974, el club vivió a la sombra del Real Madrid, con algunos capítulos muy frustrantes. El pesimismo y victimismo de la hinchada culé parecía terminar en la temporada 1973-74, la primera de Johan Cruyff como futbolista. El equipo de Rinus Michels ganó la Liga con gran autoridad y para la memoria colectiva quedan el 0-5 en el Bernabéu y el gol del holandés volador contra el Atlético de Madrid en el Camp Nou.
El club, presidido entonces por Agustín Montal, soñó a lo grande, pero Cruyff se fue diluyendo y el Real Madrid recuperó su hegemonía. El Barça tardó 11 años más en ganar otra Liga. Ni con Maradona pudo ganar un torneo que se le resistía. La primera Liga con Núñez como presidente se ganó en 1985, la del famoso penalti que Urruti detuvo en Valladolid, con Schuster como gran referente del equipo azulgrana.
La deuda del Barça
Con Núñez en la presidencia, el Barça fue un club económicamente solvente. El empresario constructor, ya fallecido, promovió la ampliación del Camp Nou y la entidad alcanzó los 108.000 socios. Luego, con Gaspart, Laporta, Rosell, Bartomeu y, nuevamente, Laporta, el club ha vivido muchas turbulencias financieras.
El Barça, con una deuda que Laporta cifró en 1.350 millones de euros el pasado verano, proyecta ahora la obra más importante del siglo XXI, convencido de que el club ingresará 200 millones de euros anuales más con el nuevo Camp Nou.
Goldman Sachs y el Arsenal
La junta directiva de Laporta ultima los pertinentes permisos municipales con el Ayuntamiento de Barcelona. También negocia el traslado al Estadi Olímpic Lluís Companys, por el que pagará un alquiler de 20 millones de euros. El gran problema por resolver es la financiación. Goldman Sachs pide más garantías a Laporta, preocupado por la subida de los tipos de interés y el posible impacto que tenga para las cuentas del club. De un club que ya no es el gran protagonista en el mercado futbolístico y que se juega mucho con el Espai Barça.
La construcción de un campo nuevo suele repercutir en el rendimiento deportivo de los equipos. El caso más evidente es el del Arsenal, que en 2006 estrenó el Emirates Stadium, con capacidad para 60.000 espectadores. El equipo del norte de Londres ganó su última Premier en 2004 y, desde entonces, se ha debilitado deportivamente. En 2004, el club emitió deuda por 371 millones de euros para financiar el nuevo estadio. Desde que se instaló en su nueva casa, el Arsenal dejó de ser un club claramente comprador y ganador. Es una referencia válida para el Barça.