La guerra de ismos le sigue saliendo muy cara al FC Barcelona. Este lunes se ha conocido el restrictivo límite salarial que tenía Mateu Alemany para confeccionar la plantilla deportiva en el mercado de invierno y es alarmante: el Barça supera en 144 millones el tope salarial permitido por la Liga. El club que preside Joan Laporta es víctima de la campaña que llevó a cabo para destrozar la gestión de Josep María Bartomeu, que fue mala, pero no tanto como dijeron. El equipo de Xavi Hernández puede pagar en verano los 481 millones de pérdidas que se presentaron a 30 de junio de la pasada temporada y únicamente se pueden salvar mediante nuevas alianzas con la Liga de Javier Tebas.
El presidente de la patronal del fútbol español está teniendo mucha mano izquierda con Laporta gracias, en buena medida, a sus buenas relaciones con Mateu Alemany. Hasta el punto de que este año los límites salariales se han presentado en marzo y no en enero, como se solía hacer cada temporada. ¿Qué hubiese significado eso? Si estos límites se hubiesen presentado en enero, el Barça seguramente no habría podido fichar a Ferran Torres, Adama Traoré y Pierre-Emerick Aubameyang. Lo bueno es que ya están en el Barça, con contratos en vigor, y nadie los puede echar.
Joan Laporta y Javier Tebas, presidentes del FC Barcelona y de la Liga / CULEMANIA
A partir de aquí, es una evidencia que si el Barça no hubiese presentado unas pérdidas infladas de 481 millones de euros por añadir 91 millones de provisiones judiciales y 160 millones de deterioro de jugadores, la situación actual sería bien diferente. ¿La economía del club seguiría mermada? Sí. ¿La situación sería límite? No. El resultado que auditó la Liga tras obtener el visto bueno del CSD, era de unas pérdidas sustancialmente inferiores a las que presentó Laporta. Con menos pérdidas, obviamente el límite salarial no sería tan insignificante como es ahora. La Liga cifra en 283 millones de euros las pérdidas sobrevenidas en las cuentas de Laporta, según un informe al que ha tenido acceso Culemanía, lo que representa el 60% de las pérdidas que presentó la junta el pasado 30 de junio.
Las pérdidas reales eran de 198 millones
Si el Barça hubiese cerrado el ejercicio con unas pérdidas reales de 198 millones de euros --coincidentes mayoritariamente con el impacto del Covid--, el club no se enfrentaría ahora a un límite salarial tan restrictivo. Sin embargo, Laporta lo tiene todo pensado y le viene muy bien esto para poder justificar el acuerdo con CVC, que en su día se utilizó para argumentar el "no" a Leo Messi. Lo que entonces no valía para retener al mejor jugador de todos los tiempos, ahora sí que servirá para salvar la economía del club y poder inscribir a nuevos fichajes en verano. CVC y la venta de Barça Studios son en estos momentos las claves para el resurgir económico del club, cuyos libros de contabilidad siguen pagando esos 481 millones de pérdidas infladas que no fueron reales.
Los nuevos límites salariales presentados por la Liga / LA LIGA