El nuevo Espai Barça genera muchas dudas a Goldman Sachs. El fondo de inversión estadounidense sigue sin aprobar la financiación del proyecto más ambicioso del club que preside Joan Laporta, cifrado en 1.500 millones de euros, tras los cambios introducidos por la actual junta directiva.
Goldman Sachs, que ya ha concedido 595 millones de euros al FC Barcelona, dio luz verde al proyecto del expresidente Josep Maria Bartomeu, cifrado en 825 millones de euros, que contemplaba la reforma del Camp Nou, de su entorno y la construcción de un nuevo Palau Blaugrana.
Dudas sobre la actual propuesta
La anterior junta directiva aseguraba que el nuevo Camp Nou generaría 150 millones de euros anuales, cifra que Laporta eleva hasta 200 millones de euros con su propuesta para renovar el estadio del Barça. Los números actuales, sin embargo, todavía no tienen el visto bueno de Goldman Sachs, que recela de la actual propuesta del club. El Barça quiere devolver los 1.500 millones con intereses en 35 años.
Joan Laporta, durante una comparecencia con el FC Barcelona / Captura Redes
Joan Laporta, presidente del Barça, en un acto oficial / REDES
"Goldman Sachs quería ver la foto de los costes, los números y todos los detalles de las obras de la reforma del Camp Nou antes de avanzar el dinero al Barça", sostiene una fuente conocedora de las negociaciones entre la financiera norteamericana y el club azulgrana.
No se han licitado las obras
El Barça todavía no tiene la licencia para iniciar las obras del Espai Barça tras los cambios introducidos por Laporta respecto al proyecto inicial de Bartomeu. El club tampoco ha licitado las obras y la actual temporada termina en dos meses y medio. Fuentes del club, no obstante, aseguran que esperan tener la financiación resuelta en verano.
El primer proyecto de Nikken Sekkei contemplaba el derribo de la primera grada y la construcción de una nueva, con más pendiente para mejorar la visibilidad de los aficionados. Esta grada finalizaba con un anillo de palcos o localidades VIP. Bartomeu también contemplaba la ampliación de la tercera grada, que pasaba a ser totalmente simétrica.
Imagen virtual del futuro Espai Barça / FCB
Imagen virtual del futuro Espai Barça / FCB
La tercera grada
Laporta, en cambio, ha introducido grandes cambios en la estructura del Camp Nou, aunque no es su entorno. La actual junta directiva mantiene la primera grada, pese a sus problemas de visibilidad, y opta por derribar totalmente la tercera.
El segundo proyecto de Sekkei contempla dos anillos de localidades VIP entre la segunda y la tercera grada, de nueva construcción. En el Barça argumentan que la nueva oferta de localidades de alto standing incrementará los ingresos anuales, aunque fuentes del sector aseguran que las plazas disponibles serán muy superiores a la demanda real. El Barça, según explicó Ferran Reverter, exdirector general, podría tener unos 8.000 asientos VIP, 3.000 más que el Santiago Bernabéu.
Más alejados del campo
La construcción de una tercera grada totalmente nueva cambiará la visibilidad de los abonados de la zona alta del estadio, que tendrán sus asientos más alejados del campo.
Los nuevos palcos VIP previstos para el nuevo Camp Nou elevarán la altura de los asientos de la tercera grada / FCB
Imagen virtual del futuro Camp Nou / FCB
El Barça todavía no ha presentado el nuevo proyecto al Ayuntamiento de Barcelona que lidera Ada Colau. Los trámites no son rápidos y fuentes del sector aseguran que ven muy complicado que las obras empiezan en mayo o junio de este año. "Sin licencia y sin la financiación resuelta, las posibilidades de ver grúas este verano son casi inexistentes", recalca la misma fuente.
Las fechas del Camp Nou
Laporta prometió que el Barça iniciaría las obras del Espai Barça al acabar esta temporada y que el Camp Nou estaría totalmente renovado en 2025. El máximo dirigente también explicó que el nuevo Palau Blaugrana, con capacidad para 15.000 espectadores, costará 420 millones de euros y estará terminado en 2026.
El Barça también construirá un pabellón polideportivo más pequeño y de una pista de hielo en los terrenos donde estuvo ubicado el Miniestadi. El Espai Barça, asimismo, contempla la construcción de oficinas y de un hotel en el espacio que actualmente ocupa el Palau Blaugrana.