Jaume Ferrer es el sorprendente nombre que en las últimas horas ha comenzado a sonar como candidato para sustituir a Ferran Reverter en la dirección general del FC Barcelona tras su polémica dimisión. Una opción que se ha puesto sobre la mesa del presidente Joan Laporta, pero que se antoja muy complicada. Según ha podido saber Culemanía, es la alternativa que más se ha comentado en los círculos de la junta directiva, donde casi todos lo conocen, pero "no le llamarán para el cargo", aseguran a este medio las fuentes consultadas conocedoras de la situación. Aunque tiene adeptos, todo hace pensar que no será el elegido. "Es prácticamente imposible", sentencian.
Vínculos con Echevarría en BCN y Gabón
Ferrer lleva desde 2012 viviendo en Gabón, en un ambicioso proyecto de resorts y safaris en plena naturaleza. En un primer momento desembarcó en el continente africano para liderar la profesionalización de la liga de fútbol gabonesa y, con el paso del tiempo, cambiaron los objetivos, pero Ferrer se mantuvo vinculado al país del que procede el nuevo fichaje del Barça, Pierre-Emerick Aubameyang. El enlace que llevó al exdirectivo azulgrana a Gabón es un hombre muy cercano a Laporta, Alejandro Echevarría, también conocido como el cuñadísimo por la relación de parentesco político que tenía con el actual presidente culé antes de que se divorciase de su hermana Constanza. Pasados unos años de ciertas tensiones familiares, retomaron la buena relación que mantenían cuando, en 2003, Laporta ofreció a Echevarría un puesto en su primera junta directiva.
Lo cierto es que Echevarría representa un contacto impopular a nivel público por sus vinculaciones con la Fundación Francisco Franco, pero muy bien valorado en las altas esferas y, sobre todo, entre los futbolistas. De su excepcional amistad con Samuel Eto'o surgió el trabajo que desembocó con Ferrer en Gabón, país donde el camerunés mantiene muy buenas relaciones. El hijo del empresario Juan Echevarría Puig, presidente en su día de FECSA o de Nissan Motor Iberica, también ha sido clave en el actual mandato de Laporta, tanto en la recogida de firmas durante las eleciones, la consecución de los avales a través de un familiar directo y el fichaje de Xavi por el Barça, haciendo de enlace con Laporta. Incluso intermedió en las frustradas negociaciones para renovar a Leo Messi. Por este motivo no se descarta que pueda tener un papel decisivo en la vinculación de Jaume Ferrer con el Barça, ya sea para proponerlo, o directamente para descartarlo.
Joan Laporta y su excuñado Alejandro Echevarría / ARCHIVO
Ferrer es conocido por haber sido el elegido de Laporta como su delfín en 2010. En un convulso final de mandato, donde las polémicas investigaciones de Método 3 sobre los vicepresidentes de la junta directiva, y también sobre algún que otro jugador como Gerard Piqué, dejaron fuera de la ecuación a varios de los candidatos favoritos, finalmente fue Jaume Ferrer el heredero designado por Laporta. Un tipo muy válido, y con muy buenos contactos en el ámbito político, amigo de la familia Pujol, pero que no tenía el carisma necesario para ganar unas elecciones a la presidencia del club que se llevó, por goleada, Sandro Rosell.
Consejeros delegados
Poco después de aquella derrota electoral, en 2012, Ferrer cambia de ámbito y se embarca en la aventura de Gabón, en un salvaje cambio de vida. Escasos años más tarde, en 2015, es imputado en el caso de Jordi Pujol Jr. Hay quien cree que "ya lleva demasiados años allí" y podría querer volver. Sin embargo, no parece que el Barça vaya a ser su destino en caso de que finalmente deje la jungla para regresar a la capital catalana. En Barcelona hay quien todavía considera que puede ser la alternativa que busca Laporta porque, entre otras cosas, ya sabe lo que es ser CEO del club. Asumió ese papel de forma temporal, casi interina, cuando Anna Xicoy dejó el cargo y hasta que se le encontró un relevo, que fue el con los años discutido Joan Oliver. Un nombre especialmente polémico tras el hundimiento del Reus, pero que sorprendentemente también figura en algunas quinielas.
Jaume Ferrer Graupera acude a declarar a los juzgados / EFE
A la espera de que se confirme el sustituto, parece que hay una entente entre la directiva actual y Ferran Reverter para que el ex de Mediamarkt siga temporalmente en el cargo hasta que se localice a un repuesto. A expensas de lo que pueda ocurrir también con personas de su confianza en el club, como Gemma Pons y Josep Maria Albert, uno de los que más gustan para asumir el mando temporalmente si se tercia es Mateu Alemany. El director de fútbol es más cercano a la Liga que Reverter y puede ayudar a desencallar unas relaciones muy enquistadas, pero en el club no quieren seguir los pases de Bartomeu, que centralizó en Òscar Grau las funciones de CEO y responsable de negociaciones con los futbolistas --cargo que antiguamente ostentaba Raúl Sanllehí-- y luego la cosa acabó mal.