El Barça y el Chelsea están a la greña. Enfrentados por varios futbolistas. Mientras el club azulgrana suspira por Azpilicueta y Christensen, defensas que acaban contrato el 30 de junio de 2022, los londinensen tientan a Dembelé y a Araujo. El primero acaba contrato en cinco meses y el defensas uruguayo, en junio de 2023.
La guerra entre Joan Laporta y Roman Abramovich vive su segunda etapa. Si sonados fueron sus enfrentamientos en la primera etapa del abogado barcelonés como máximo responsable del Barça, las necesidades deportivas y económicas del club azulgrana pueden abrir nuevas tensiones entre ambas entidades.
Roman Abramovich, propietario del Chelsea / EFE
El Barça, según aseguran en Inglaterra, tiene un acuerdo cerrado con Azpilicueta, defensa internacional de 32 años que puede jugar como lateral, preferentemente por la derecha, y como central. Su polivalencia, experiencia y solvencia gustan mucho a Xavi. A Laporta le encanta que pueda llegar con la carta de libertad.
El sevillista Koundé
Xavi también quiere un central de primer nivel. Su prioridad es el sevillista Koundé, pero el defensa francés es muy caro. El Sevilla se ha remitido siempre a la cláusula de rescisión del futbolista --80 millones de euros-- cuando el Barça y el Real Madrid han preguntado por él El plan B del técnico azulgrana es Christensen, un central muy expeditivo pero con peor salida del balón.
Araujo remata de cabeza en el campo del Linares / EFE
El Chelsea asume que Azpilicueta, Christensen y Rüdiger pueden irse este verano. En Stamford Bridge preparan la gran revolución en la defensa y el club londinense ya ha contactado con el barcelonista Araujo, que sigue sin renovar su contrato con el Barça. Las diferencias económicas entre las dos partes son importantes y el Chelsea está dispuesto a ofrecerle un contrato importante. En Londres se habla de cinco o seis millones de euros anuales.
Dudas con Dembelé
Otro futbolista que gusta mucho al Chelsea es Dembelé. El delantero francés acaba contrato en junio y, aparentemente, las negociaciones con el Barça están rotas. Su futuro, sin embargo, es incierto. El club azul de Londres ya ha contactado con Moussa Sissoko, representante del futbolista, pero sus elevadas pretensiones parecen haber enfriado el interés. En el Chelsea no quieren romper la actual escala salarial con Dembelé, un jugador muy desequilibrante pero con muchos altibajos en su juego.
Dura entrada de Del Horno a Messi en Stamford Bridge, en 2006 / REDES
En el pasado, Barça y Chelsea anduvieron a la greña. Sobre todo en la etapa de Mourinho como entrenador del equipo inglés. Y tensas fueron las dos eliminatorias que disputaron ambos equipos en la Champions. En la temporada 2004-05, los blues eliminaron a los barcelonistas tras un polémico gol de John Terry. Un año después llegó la venganza azulgrana y la expulsión de Asier del Horno por una dura entrada a Messi. Ese día, el técnico portugués habló de "teatro del bueno". Tres años después, Iniesta silenció Stamford Bridge con su gol más importante con la camiseta del Barça.
En la época de máxima tensión entre el Barça y el Chelsea, por entonces un nuevo rico, el club azulgrana fichó a Gudjohnsen por 12 millones de euros y, un año después, los londinenses pagaron 5,5 millones de euros por Belletti, el héroe de París. De la segunda Champions que ganó el Barça tras superar al Arsenal en la final. Quince años después, ambos clubes vuelven a pelearse por algunos futbolistas en un contexto económico muy distinto.