Joan Laporta, tal vez de manera precipitada, ha dado un puñetazo encima de la mesa con Ousmane Dembelé. El presidente del Barça da por rotas las negociaciones con el futbolista francés para renovar su contrato y envía un claro aviso a la plantilla. Quien no se adapte a las nuevas condiciones salariales, tiene las puertas abiertas. Su manera de actuar, salvando las distancias, ha recordado a Florentino Pérez, el presidente del Real Madrid, que ha ganado todos los pulsos con sus jugadores.
Diez meses y medio después de su victoria en las urnas, la reconstrucción del Barça todavía está en una fase muy precaria. De momento, los resultados son desalentadores. Se han ido Messi, Griezmann. También Coutinho. Y el equipo está eliminado de la Champions, la Copa y la Supercopa. En la Liga, a 17 puntos del Real Madrid, el Barça aspira a la cuarta plaza.
La oferta a Dembelé
Con un escenario deportivo tan deprimente, Laporta todavía tiene mucho trabajo para renovar la plantilla. El presidente deseaba la renovación de Dembelé, a quien ofrecía un contrato de larga duración y un fijo inferior al actual. Para compensarlo, estaba dispuesto a incluir unas variables muy generosas en función de su rendimiento. En caso de cumplirlas, podía ser el jugador mejor pagado de la plantilla.
El jueves, tras vencer el ultimátum que le dio a Dembelé, el Barça dio por rotas las negociaciones. Mateu Alemany, director de fútbol, le recomendó que se buscara una salida rápida del club y el futbolista le recordó que tiene contrato en vigor.
Florentino Pérez y Cristiano Ronaldo en las instalaciones del Real Madrid / EFE
El caso de Sergio Ramos
Laporta ha querido dejar claro que él manda en el Barça. Como Florentino en el Real Madrid. La pasada temporada, en el Bernabéu vivieron un auténtico culebrón con la renovación de Sergio Ramos. El futbolista pedía dos años y el presidente solo le daba uno.
Ramos tensó la cuerda. Rechazó todas las ofertas del club. Florentino también le dio un ultimátum que el futbolista pasó por alto. Cuando se desdijo, el presidente le respondió que su oferta ya había caducado. Con este gesto, el máximo dirigente del Real Madrid zanjó un debate que se había envenenado mucho y replicó con el fichaje de David Álaba. En el Barça, Laporta lo tendrá más complicado para relevar a Dembelé.
Raúl, Casillas y Cristiano
En el pasado, Florentino también se mostró inflexible con Raúl, Iker Casillas y Cristiano Ronaldo. El presidente del Real Madrid siempre ha priorizado las necesidades del club a los deseos de sus futbolistas, por muy estrellas que fueran. Sin embargo, nunca fulminó a nadie en plena competición.