Golpe de efecto. En el FC Barcelona interesa que se hable lo menos posible sobre el mal partido que los pupilos de Ronald Koeman cuajaron este miércoles en Champions contra el Dinamo de Kiev. Los azulgranas ganaron por la mínima, pero la segunda mitad dejó mucho que desear, sustentada en un fútbol soporífero, donde no destacaron ni Ansu Fati, ni Coutinho, ni el Kun Agüero, que entraron como revulsivos. En esta semana de clásico, la gran noticia para generar ilusión es la renovación de Ansu.
Igual que ocurrió la semana pasada, con el anuncio de la mejora de Pedri hasta 2026 dos días antes de una polémica asamblea de socios compromisarios, en esta ocasión el Barça de Laporta pretende buscar el lado positivo antes de la segunda parte de la asamblea y de un clásico donde el Real Madrid visitará al Camp Nou con aura de favorito. Por este motivo, el club invita a celebrar que Ansu Fati seguirá en el Barça hasta 2027 para eclipsar esta victoria amarga en Champions. Un beber para olvidar en toda regla.
1.000 millones de cláusula
El joven crack formado en La Masía es la joya de la corona. El futbolista llamado a marcar la próxima era, al que muchos le cargan el apodo de "heredero de Leo Messi". Palabras mayores todavía. La noticia es muy positiva. Con un sabueso como Jorge Mendes al mando de las negociaciones no era fácil prolongar el contrato de la perla blaugrana, que tendrá un salario superior al de Pedri: entre seis y siete millones brutos. Como ocurre con su joven compañero canario, Ansu también estará blindado con una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros.
"Muy feliz de poder seguir en este club, al que tanto quiero", ha reconocido Fati tras firmar el acuerdo en las oficinas del Camp Nou justo después del partido contra los ucranianos. "Es un día muy feliz para mí y mi familia, es por lo que trabajo y ahora toca seguir trabajando y devolver la confianza en el campo". Este jueves, rueda de prensa a las 12 en el Auditori 1899.