El Barça de Joan Laporta tiene el gran reto de generar nuevos recursos. Tras aligerar la masa salarial del primer equipo de fútbol con las salida de Messi y Griezmann y reducir algunas fichas, el club busca nuevos ingresos y confía en cerrar un nuevo patrocinador para su camiseta que sustituya a Rakuten. Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça, ha puesto el listón muy alto: pide más de 55 millones de euros por temporada. Toda una declaración de principios que esconde el temor a una caída importante desde la marcha de Leo Messi
El Barça, hasta la temporada 2020-21, cobraba 55 millones de euros anuales de Rakuten, que prorrogó su contrato un año, en plena pandemia, más a cambio de 30 millones anuales. La rebaja fue muy significativa y el club busca ahora un nuevo acuerdo mucho más favorable. La actual coyuntura económica y la ausencia de Messi juegan en contra.
Joan Laporta, durante la campaña electoral / ESTIMEM EL BARÇA
“Quien quiera poner su nombre en la camiseta del Barça, tendrá que pagar”, ha manifestado Romeu en una entrevista concedida a TV3. En la misma, el directivo responsable de la parcela económica ha añadido: “Nos fijamos en el valor de antes de la pandemia y lo hemos de superar”.
El nuevo Espai Barça
Romeu ha expresado su convicción de que el nuevo Espai Barça “ayudará a sanear el club más rápidamente”, y ha recalcado: “Es un proyecto que se paga solo con ingresos extraordinarios”. Su discurso es parecido al de Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, a quien elogió recientemente.
El nuevo Espai Barça, que contempla la transformación del Camp Nou y la construcción del nuevo Palau Blaugrana con capacidad para 15.000 espectadores, es totalmente asumible por la entidad, según Romeu. Y ha argumentado que “no solo no generará sobrecoste al club, sino que aportará nuevos ingresos gracias a la explotación de todo el Espai Barça”, que contempla la construcción de un hotel y oficinas.
Imagen aérea digital del futuro Camp Nou / FCB
Mercado de invierno
El vicepresidente económico del Barça también ha hablado de la preocupación de muchos socios sobre la calidad de la actual plantilla. Ha destacado que el club “todavía tiene margen de fair play para inscribir jugadores” en el mercado de invierno: “Tenemos 20 millones de euros, una cifra que empieza a ser importante, y que podríamos destinar a traer al jugador o jugadores adecuados para las plazas que el cuerpo técnico decida”.
La actualidad deportiva de la temporada actual está marcada por la salida de Messi, que sigue suscitando muchos debates en el Camp Nou. La semana pasada, el presidente, Joan Laporta, dijo que esperaba que el futbolista aceptara jugar gratis una temporada en el Barça. “Yo soy igual de iluso que el presidente. Es muy lícito lo que ha hecho Messi y no se trata de ninguna crítica, pero viendo todos los inconvenientes que nos ponían y viendo el esfuerzo que hacia el club, yo también pensé que podría jugar gratis. ¿Por qué no lo hubiera aceptado la Liga? Hubiera sido muy legítimo que un jugador hiciera esta declaración de amor a un club y unos colores.