La rueda de prensa de la Due Diligence ha puesto el foco sobre algunos asuntos escabrosos de la gestión de Josep María Bartomeu. Una de las cuestiones polémicas que salieron a la luz son las comisiones pagadas en fichajes. Un total de 48 millones de euros, alcanzando márgenes del 20% al 33% sobre la operación, según avanzó Ferrán Reverter. Uno de los casos que genera polémica, según ha explicado el periodista Jordi Basté en Rac1, es el relativo a Ivan Rakitic.
Basté ha explicado este jueves que el Barça pagó una comisión de seis millones de euros al Sevilla por la salida del futbolista croata. Una información que ha podido verificar Culemanía, aunque tiene varios matices. Según el periodista, el club abonó los seis millones a los agentes del jugador como compensación por sacarlo del Barça y así liberar su salario. Es conocido que en el verano de 2020, Bartomeu puso en marcha una ambiciosa operación salida para rebajar la masa salarial con los traspasos, prácticamente regalados, de Luis Suárez, Arturo Vidal y el propio Rakitic.
Seis millones de euros
Sin embargo, según informan diversas fuentes que dirigían el Barça cuando se produjo la operación, el concepto por el que se pagaron esos seis millones no es el mismo. La salida de Rakitic no comportó comisiones sino una liquidación para compensar la diferencia salarial entre lo que cobraba en el FC Barcelona y lo que iba a cobrar en el Sevilla. Esto significa que la entidad de Nervión no asumió la totalidad del salario del jugador, sino tan solo una parte.
El croata, que terminaba contrato en 2021, había sido puesto en la rampa de salida en el mercado de verano de 2020 junto con Luis Suárez, Aturo Vidal y Semedo, entre otros. El obstáculo en estos casos era siempre el mismo: los futbolistas no querían marcharse a otro club cobrando un salario sustancialmente inferior. Sin embargo, el Barça, que ya sufría la asfixia del coronavirus y de una política económica llevada al límite, necesitaba liberar sueldos y rebajar la disparada masa salarial.
Rakitic fue traspasado al Sevilla por una mínima cantidad de 1,5 millones que podían ascender a 6 millones en caso de cumplirse una serie de variables. El jugador, aparentemente, aceptó rebajarse el salario para desencallar la situación. Pasó de cobrar unos 7,5 millones de euros netos (15 brutos) a aproximadamente la mitad: 3,7 millones de euros netos.
Objetivo: mantener salario
Sin embargo, detrás de esta aparente motivación altruista del croata, había más cosas que no se habían contado. El club azulgrana pagó seis millones de euros que, supuestamente, no fueron a parar a las manos del jugador, sino a la sociedad Actyvos Group, la agencia del representante del futbolista, Aturo Canales, que no ha respondido a las llamadas de este medio.
El hecho de que el dinero fuese a la agencia, y no directamente al jugador, es lo que lleva a pensar que se trataba de una comisión. Aunque las fuentes consultadas aseguran que se trataba de una liquidación, o indemnización, para compensar la reducción de salario que Rakitic iba a sufrir al fichar por el club hispalense. El Barça pagaba seis millones que, sumados a los 7,5 del Sevilla, le ayudaban a igualar el sueldo que tenía en Barcelona. A cambio, el club perdía al jugador pero se ahorraba 8,5 kilos. Un caso distinto al de Luis Suárez, que se llevó una liquidación mucho más alta del Camp Nou, lo que le permitió cobrar más dinero al año con su traspaso al Atlético.
La influencia de Canales en el vestuario culé
Los nombres clave de esta operación fueron Arturo Canales y Fernando Solanas, que en las últimas horas ha comenzado a sonar por ser también el agente de Xavi Hernández. A través de su agencia Actyvos Group, el agente ha dirigido la carrera deportiva de uno de los pesos pesados del vestuario azulgrana, Gerard Piqué. Samuel Umtiti, ahora apartado al ostracismo por Koeman, es otro de los clientes del grupo.
Arturo Canales con Piqué y Ronaldinho / REDES
Los tentáculos de Canales van más allá de los límites del Camp Nou. Su mano derecha y vicepresidente de Activos Group, Fernando Solanas, ya negocia para que Xavi acabe ocupando el hueco que va a dejar Koeman cuando la junta decida darle el finiquito. De llegar a sentarse en el banquillo azulgrana, Canales adquiriría un grado mayor de influencia del que ha tenido en los últimos años en can Barça, tan solo equiparable al de Josep María Orobitg, agente de Busquets, Roberto y Mingueza, además de algunos ex del Barça con galones como Guardiola, García Pimienta u Oscar García Junyent. Los dos últimos también han sonado como recambio de Koeman.