Vista la precisa radiografía de la salud económica del Barça presentada por el director general del club azulgrana, Ferran Reverter, a Laporta no le queda más remedio que replantearse sus vías para obtener nuevos ingresos y conseguir que le salgan las cuentas. El objetivo anunciado por el CEO pasa por obtener beneficios desde el primer año.
Cambio de rumbo
La junta directiva ha pasado de impugnar y emprender acciones legales contra la Liga y CVC a no descartar el acuerdo con la patronal y el fondo de inversión. El club podría estar negociando la posibilidad de reengancharse a la operación que la competición y la firma de inversión aprobaron para inyectar 2.700 millones de euros en el fútbol profesional español. “El Barça no cierra ninguna puerta y no está descartado”, ha asegurado Ferran Reverter.
Ferren Reverter CEO del Barça en la presentación de la Due Diligence / EFE
El director general ha querido remarcar que “las condiciones de CVC que propusieron no podíamos aceptarlas, pero, si las cambian, podemos hablar”, abriendo las puertas de par en par al acuerdo. El club azulgrana podría estar buscando que la entrega del dinero fuera a fondo perdido o que, en esa devolución a 40 años, el importe a retornar sea inferior. Parece que aquel informe en el que la Comisión Económica del Barça argumentaba en ocho puntos el 'no' al acuerdo, ahora ha quedado en papel mojado.
El ‘no’ a CVC y la marcha de Messi
Cabe recordar que de los 2.700 millones de euros que contemplaba el acuerdo, aproximadamente unos 284 millones hubiesen ido dirigidos a las arcas blaugranas. Un dinero que hubiese permitido hacer que Leo Messi pudiese haber seguido en el club, según afirmó Javier Tebas.
Finalmente, Laporta decidió rechazar el acuerdo y alegó que “no quería hipotecar los derechos televisivos del club durante 50 años”. Para el Barça lo aceptable era que esta cesión de derechos se hubiese hecho para unos 10 años.
Ferren Reverter y Joan Laporta en la presentación de la Due Diligence / EFE
Laporta dijo entonces que no estaba dispuesto a hipotecar el club por ningún jugador ya que la entidad estaba por encima de cualquier futbolista. Ahora, sin embargo, el mandatario culé estaría dispuesto a replantearse el acuerdo con el argentino ya en París. Una maniobra que podría alimentar la hipótesis que sostiene que la junta de Laporta siempre fue partidaria de dejar marchar a la “pulga” para aliviar la presión salarial del club y ayudar a sanear las cuentas del Barça.
"Chantajeado"
El presidente azulgrana señaló que fue "chantajeado" al hacerle elegir entre aceptar el acuerdo con CVC y la Liga o no cumplir el Fair Play Financiero y tener que dejar marchar a Messi. Parece que la predisposición a formar parte del convenio entre la patronal y el fondo británico ya no parece tan inverosímil con el argentino ya fuera del club.
En caso de que este acuerdo fructificara, no podría ser una carta blanca para el Barcelona ya que los 39 clubes que aceptaron el acuerdo original dieron el visto bueno a la venta del 10.95% de la empresa que maneja el negocio comercial de la Liga y un derecho de cuenta en participación del 10,95% sobre los derechos audiovisuales, algo a lo que la junta directiva blaugrana se opuso por completo.