El FC Barcelona debe resolver cuanto antes las carpetas de los patrocinadores. Rakuten y Beko terminan el próximo junio, mientras la relación con Nike no es la mejor. Falta acordar un nuevo contrato después de que en 2018 caducara el acuerdo a corto plazo que firmaron en 2016. Según ha publicado este viernes 2Playbook, Joan Laporta ha querido frenar las demandas judiciales entre la entidad y la empresa americana.
El club presentó antes de las elecciones presidenciales un carrusel de demandas contra la marca por la comercialización de artículos deportivos. En total estas facturas sumaban casi 50 millones de euros. Fue la comisión gestora de Carles Tusquets quien las presentó y el máximo mandatario ha decidido suspender estos litigios judiciales para encontrar una solución amistosa.
Demandas fruto del descontrol
Ambas partes están obligadas a entenderse. La junta directiva de Josep Maria Bartomeu anunció en 2016 la renovación con la empresa de ropa hasta 2028. Se cerraba por 155 millones de euros anuales, 55 de los cuales son ingresos de patrocinio, 30 millones por inversión de marketing y el resto ingresos brutos que se contabilizaban con la recuperación con el negocio del retail.
Equipación Nike del Barça, a la venta en la tienda oficial / FCB
Como ya comentó en su día Culemanía, Nike y Barça nunca reflejaron en un contrato definitivo todas estas condiciones y las acciones de una y otra parte eran interpretadas de un precontrato o, como se conoce en el sector, un contrato short-term. El acuerdo a largo plazo debía cerrarse antes de 2018, pero no se concretó.
Ante esta falta de control, y siempre según las informaciones, se dieron tres demandas judiciales: por impagos en los royalties por la venta de réplicas de camisetas, por la penalización que Nike imponía al Barça por incumplimientos y por abuso de posición de dominio.
El equipo de BLM (Barça Licensing & Merchandising) detectó que la marca americana había dejado de pagar la liquidación correspondiente a las réplicas. Estas se venden en varios negocios, no llevan el logo de la marca y presentan una calidad inferior a la que se pueden encontrar en tiendas oficiales. Este negocio lo lleva la empresa catalana Roger’s y pagaba un canon anual por del derecho de explotar el retail azulgrana. Gran parte de los 50 millones de euros que le reclamaba el Barça a Nike se centran sobre todo en este asunto.
Una imagen de la Barça Store Canaletas / FC Barcelona
Pacto amistoso
La junta directiva de Joan Laporta quiere encontrar un pacto amistoso. Quedan más de seis años de relación con Nike y es la principal fuente de ingresos de la entidad, más después de la salida de Rakuten y Beko. En los últimos presupuestos de los azulgranas prevén un aumento de 24 millones de euros en el área comercial respecto al curso pasado: de 268 millones de euros a los 292. Hay trabajo por delante.