Jaume Roures, uno de los principales avalistas --junto a Audax Renovables-- de la junta directiva del FC Barcelona de Laporta, retirará su aval de 35 millones a finales de noviembre. Se sumó en marzo, después de las elecciones, para evitar una repetición en las urnas pero ya avisó que “la garantía solo tiene vigencia durante unos meses”.
El próximo 30 de noviembre, cerca de una nueva Asamblea de socios compromisarios, se reformularán las cuentas y se presentará un nuevo presupuesto. De este, se determinará un nuevo aval. En marzo se tuvo que avalar 124,6 millones de euros que corresponden al 15% de los 800 millones presupuestos. Ahora todo se rebajará.
Joan Laporta en la rueda de prensa anunciando el adiós de Messi / EFE
Así pues, cabe la posibilidad de que los 35 millones de euros que no avalará Roures no tengan que ser cubiertos por ningún otro empresario. La crisis del coronavirus solo ha hecho que empeorar la situación. Recientemente, el propio Joan Laporta comentó que esperan unas pérdidas de 487 millones de euros.
También es cierto que, en los últimos tiempos, la relación entre el empresario y el máximo mandatario no ha sido la mejor posible. La directiva sigue interesada en la creación de una Superliga europea, como recientemente se vio con el acuerdo la Liga-CVC y el encuentro con Florentino Pérez y Andrea Agnelli, algo que no interesa al propietario de Mediapro.
Serias consecuencias
Como hemos comentado anteriormente, con casi total seguridad los 35 millones de euros de Roures ya no serán necesarios a finales de noviembre. Igualmente, si cae otro avalista del proyecto, las consecuencias pueden ser muy graves. Entraría una nueva comisión gestora que cogería las riendas del club hasta finalizar un proceso electoral.
Puntos de votación de las elecciones del Barça del 7M / Culemanía
Así lo especifica el artículo 54 de los Estatutos del Barça: “En caso de que la ley exija la presentación de avala, antes de la toma de posesión, la nueva junta elegida deberá haber formalizado el aval de manera que exige la normativa vigente. En caso contrario, no se producirá la toma de posesión de la junta elegida y se considerará vacante este órgano de gobierno, con lo cual se constituirá automáticamente la comisión gestora”.
Este deberá ser aceptado por la Liga, como lo fue en marzo el de 124,6 millones de euros, y no se esperan contratiempos. Las cantidades presupuestadas serán bastante inferiores a los 800 millones de euros y no será necesario el aval de Jaume Roures, pero sí mantener los otros avalistas.