Empiezan a solucionarse varios asuntos pendientes en el área económica del FC Barcelona. La entidad azulgrana ha confirmado que Gerard Piqué, segundo capitán del equipo, es el primero del grupo en acceder a una rebaja salarial. Esto ha propiciado que finalmente se puedan inscribir a varios fichajes, como es el caso de Eric García y Memphis Depay.
La situación de Sergio Busquets y Jordi Alba también parece irse encaminando de forma positiva. El Barça ha compartido un comunicado en el que afirma lo siguiente: “El Club sigue trabajando conjuntamente con dos de los cuatro capitanes como son Busquets y Alba para llegar a una adecuación salarial a la situación que vive actualmente la entidad. En este sentido cabe destacar que la predisposición por parte de ambos jugadores es total y absoluta”.
Sergio Busquets en su discurso como capitán / FC Barcelona
Por otra parte, Sergi Roberto conversó con el medio La Vanguardia sobre distintos temas, entre ellos la de su actualidad contractual. "Lo que sentimos es que se ha hablado mucho sin saber. Yo, por ejemplo, estoy esperando la propuesta del club. Mi situación es diferente, acabo contrato este año y renovaré a la baja. Estamos ayudando. No entendemos los palos que nos han caído, no tienen ningún sentido", aclaró.
El entrenador azulgrana, Ronald Koeman, declaró en rueda de prensa que destaca “la actitud” de los jugadores anteriormente mencionados. Además, aseguró que: “Llevan muchos años aquí, quieren ayudar el club para mejorar la situación económica. Es importante y demuestra que son gente de casa".
Koeman y Piqué discutiendo un detalle táctico contra el Villarreal / FC Barcelona
Historia difícil
A pesar de que los cuatro capitanes estén finalmente accediendo a aceptar la rebaja salarial, la verdad es que ha sido un camino complejo para llegar al punto actual. Lo primero fue cuando pusieron muchas trabas a Bartomeu, cuando recortó el 12% en los inicios de la pandemia del coronavirus. Posteriormente sucedería lo mismo en el momento que la comisión gestora pactó el aplazamiento del 30% de los salarios, entre noviembre y diciembre.
Por último, cuando dieron largas a una posible rebaja del 20% del sueldo. Una decisión a la que debió renunciar Joan Laporta antes del 30 de junio. Aunque la historia parece que por fin se está llevando por los caminos correctos, no deja de ser curioso lo mucho que han tardado las negociaciones, en cada una de esas etapas.