La renovación de Leo Messi para el FC Barcelona está al caer. El delantero renovará por dos temporadas y se rebajará el sueldo a la mitad. Percibirá unos 50 millones de euros brutos por curso. Pese a la rebaja, el club necesita seguir haciendo ingeniería financiera para prolongarle el contrato y, a su vez, rebajar la masa salarial.
Según informó RAC1 este fin de semana, la entidad culé debe liberar alrededor de 200 millones de euros en masa salarial para seguir contando con el 10. Joan Laporta ya afirmó públicamente que actualmente ésta suponía el 110% de los ingresos --algo insostenible-- y que, como consecuencia, se producirán salidas importantes.
También de la boca del presidente llegó a salir la estrategia a seguir: “La relación que tenemos es que por cada 100 que liberamos, pueden entrar 25”. En la misma línea fue Javier Tebas este domingo en Onda Cero: “Si el Barça se ahorra 10 millones de euros de una ficha, solo podrá gastar 2,5 millones en una nueva”. Es el escaso margen que condiciona la construcción de un nuevo equipo.
Joan Laporta, antes de la Asamblea de compromisarios / EFE
Siguiendo esta norma de los 25 que aumentan de límite salarial por los 100 que salen, queda claro que la renovación de Messi supondrá una salida de 200 millones de euros. Para renovar el argentino, que recibirá unos 50 millones por temporada, se deben liberar fichas por valor de 200 ya sea por traspaso o por rebaja salarial. Aunque la primera parte de esos 200 de rebaja la pone el propio Messi, cuyo sueldo actual ronda los 130 millones brutos. El resto afectará a la plantilla.
Dos opciones
Una de las opciones que se contemplan para rebajar 200 millones de euros es la reestructuración salarial. Hay varios futbolistas importantes que están en conversaciones con la entidad para rebajarse su sueldo anual. Sin ir más lejos, Gerard Piqué es uno de ellos. No se descarta que aquellos que accedan prolonguen su vinculación a cambio de un reajuste a pesar de que ya renovó hace unos meses. Los casos de Busquets y Jordi Alba son más obvios.
Otra opción es el traspaso de jugadores. Hay un buen grupo de futbolistas que tienen una alta ficha salarial y cuyo sueldo no se justifica con las actuaciones sobre el terreno de juego. En este grupo entrarían jugadores como Miralem Pjanic, Junior Firpo, Neto Murara, Francisco Trincao, Martin Braithwaite, Philippe Coutinho, Clement Lenglet o Samuel Umtiti, que podrían seguir los pasos de Todibo. Más allá de lo que se ingrese, se pone el foco en lo que se ahorra.
Objetivo: aumentar el límite salarial
A parte del ahorro de fichas que se pueda producir la próxima temporada, también se tiene que poner especial énfasis en los ingresos, directamente ligados al límite salarial. El curso pasado fue de 347,07 millones de euros, una cifra prácticamente imposible de cumplir en la próxima temporada.
Leo Messi con Joan Laporta / EFE
Se espera que, si no se revierte la situación y se empiezan a generar ingresos, este límite sea incluso más bajo. Pese a la rebaja de sueldo de Messi y de la salida de varios futbolistas, seguiría siendo complicado cumplirlo. El club prevé 246 millones de pérdidas para el próximo curso. Escenario poco optimista.
Mientras se intentan reactivar varias carpetas como patrocinios o ticketing, el Barça de Laporta se ha marcado como objetivo ahorrar en salarios. Seguir contando con el argentino supone 200 millones de rebaja de la masa salarial. Todo apunta que este verano será la despedida de muchos jugadores de la primera plantilla.