Mateu Alemany ha puesto en alerta a la junta directiva del FC Barcelona. El director de fútbol ha elaborado un informe en el que detalla que, comparando rendimiento y salarios, las fichas de los jugadores azulgranas están por encima de lo debido. Recortar los sueldos será una de las primeras soluciones del club catalán para reducir los gastos.
El equipo culé tiene una de las masas salariales más altas de toda Europa y son muchos los futbolistas que no rinden en concordancia con lo que cobran. Son varios los sueldos que hipotecan al Barça. El más destacado, fundamentalmente por cantidad, es el de Leo Messi, que percibe 50 millones de euros netos por temporada, lo que a la entidad le supone un desembolso de 100 'kilos'.
Evidentemente, el delantero argentino es el líder del FC Barcelona y el que saca las castañas del fuego al conjunto catalán, pero en el contexto actual sus emolumentos son prácticamente inasumibles. Su contrato acaba el 30 de junio y, si renueva, su sueldo quedaría reducido aproximadamente a la mitad. O al menos esa es la idea de Laporta.
Rendimiento pobre
El salario de Messi no es el mayor problema que tiene el Barça actualmente. Sin ir más lejos, Antoine Griezmann percibe 17 millones de euros netos (34 brutos) y no está siendo tan decisivo como debería serlo con el sueldo que tiene. Ha crecido en el tramo final de la temporada, pero no es suficiente.
Griezmann jugando contra el Celta de Vigo / FC Barcelona
Sergio Busquets y Gerard Piqué, que han completado un curso irregular, cobran cada uno diez millones de euros netos, es decir, 20 brutos. Sus mejores años ya han pasado y de cara a la próxima campaña, si no salen, deberían dar un paso al costado para que otros futbolistas asuman mayor responsabilidad. Y ese paso al costado pasa también por reducirse el salario.
En una situación similar, aunque con menor sueldo, se encuentra Jordi Alba. El lateral de l'Hospitalet ingresa seis millones de euros por temporada, lo que a la institución le supone un gasto de 12 millones. Es el mejor socio de Messi, pero sus recursos ofensivos son cada vez más limitados y defensivamente ya no tiene la agresividad de antaño.
No aportan
Los salarios mencionados hasta ahora no son tan alarmantes para el FC Barcelona si tenemos en cuenta que Philippe Coutinho cobra 12 millones de euros por temporada, unos 24 brutos. La lesión en el menisco le ha apartado de los terrenos de juego durante 2021, pero la realidad es que antes de lesionarse ya aportaba muy poco al equipo catalán. Su venta es la más prioritaria.
Philippe Coutinho en un partido del Barça / EFE
Y qué decir de Samuel Umtiti, que no es ni la sombra del futbolista que fue entre 2016 y 2018. Percibe seis millones de euros (12 brutos) y la llegada de Éric García, sumada a las promociones de Araujo y Mingueza, debería suponer su final de etapa en el Camp Nou. No solo no suma, sino que a veces resta.
Miralem Pjanic cierra la lista de los jugadores que hipotecan al FC Barcelona. Como Umtiti, cobra seis millones de euros y ha tenido una participación testimonial en el equipo azulgrana. Está muy lejos del nivel de Busquets, Frenkie de Jong y Pedri. Todavía tiene pretendientes en el fútbol europeo.
El Barça debe reducir gastos y tiene que empezar por los salarios que no van en concordancia con el rendimiento. Futbolistas que tienen un caché demasiado elevado para su aportación al primer equipo.