La continuidad de Leo Messi en el Barça parece que cada vez está más cerca. A pocas semanas de acabar la temporada, las negociaciones de Joan Laporta con el entorno del argentino ya han empezado. De hecho, hace pocos días el presidente del FC Barcelona se reunió con Jorge Messi, padre y representante del crack, comiendo en un restaurante de Barcelona y tratando este tema, determinante para el futuro del club blaugrana, según ha explicado el periodista Xavi Torres.
La predisposición de ambas partes es buena. La situación del 10 ha cambiado totalmente respecto a hace un año, cuando envió el burofax. La llegada de una nueva directiva y un presidente con quién guarda una relación más próxima, junto a las bases que ha construido el equipo tanto de presente como de futuro, sumadas a la opción de volver a ganar títulos, le han mostrado de nuevo todo lo bueno que tiene en el Camp Nou.
Leo Messi con Joan Laporta / EFE
En este sentido, su renovación está más cerca que nunca. El propio Messi ha tomado la iniciativa, y consciente de la complicada situación económica de la entidad, ha ofrecido al Barça reducirse considerablemente su salario actual (75 millones de euros netos), a cambio de un contrato de diez años dividido en tres fases.
Las pretensiones de los Messi
Según ha podido saber Culemanía, los Messi se conformarían con un salario de 25 millones netos al año (fijos, es decir, sin contar las variables) durante una década. Este acuerdo le permitiría permanecer dos temporadas en el Camp Nou, para luego emprender la aventura americana con Luis Suárez en el Inter de Miami mientras hace de embajador del club blaugrana. Una aventura que llegaría después de su último Mundial, el de Qatar 2022.
Esta segunda fase sería beneficiosa para ambas partes, ya que el plan del Barcelona pasa por también obtener beneficios de la explotación comercial de la imagen de Leo en Estados Unidos. Esto facilitaría la llegada de nuevos patrocinadores procedentes de norteamérica. Una estrategia que pasa incluso por el punto de construir parques temáticos y hacer todo tipo de eventos y alianzas para posicionar al Barça en territorio americano, aprovechando la explosión provocada por la llegada del argentino a EEUU.
Leo Messi, capitán del Barça | EFE
Finalmente, las exigencias de Messi pasan por volver al Camp Nou una vez decida dar por acabada esta etapa, y tener un papel importante en el área deportiva. Se trata de una propuesta que se basa en el modelo Juan Carlos Navarro, aunque con cifras mucho más contundentes. El actual mánager del Barça de baloncesto firmó en su retirada un acuerdo de diez años a razón de un millón al año, en la que trabajaría como embajador y en la que se contemplaba su regreso con un papel importante en la parcela deportiva.
Modelo Navarro
Por tanto, los Messi están abiertos a continuar en el Barça, y a rebajarse considerablemente su salario para echar una mano al club en una situación comprometida. Pero no solo eso, sino que su intención es acordar que la relación con el FC Barcelona sea extensa, y prácticamente para toda la vida. Pese a tener en mente una aventura en Estados Unidos, no quiere desligarse del club de su vida, y desea colaborar para conseguir que vuelva a la cima del deporte mundial.