La creación de la nueva Superliga guarda muchos secretos ocultos, pero sacó a la luz hechos que hace tiempo que se intuían: que varios clubes europeos no estaban de acuerdo con las medidas y propuestas por parte de la UEFA y la FIFA. Es por eso que optaron por hacer camino por su cuenta, y de forma unilateral, crear una competición en la que no se tienen en cuenta los méritos deportivos, sino los económicos.
Los dos grandes organismos del fútbol europeo, junto a Ligas, Gobiernos, clubes y futbolistas, ya se han mostrado contrarios a la creación de esta competición que atenta contra el fútbol modesto, y confirma el deporte como negocio. La FIFA y la UEFA fueron todavía más lejos y amenazaron a los clubes y jugadores que participen con duros castigos.
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No obstante, la sensación es que esta separación es ya insalvable. Las superpotencias del fútbol europeo han encendido ya la mecha, y ni la modernización de la Champions League ni un mejor repartimiento de los ingresos mejorará ya la situación. Sobre todo, porque se han producido también duras traiciones durante el camino.
Agnelli, en el punto de mira
Es evidente que estos grandes clubes llevaban años trabajando en la creación de la nueva competición, a espaldas de la UEFA y mientras disputaban sus competiciones. El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, no dudó en señalar sobre la Superliga que es una “propuesta vergonzosa” de entidades “guiadas por la codicia” y “escupe en la cara a todos los que aman el fútbol”.
Y es que para más inri, la jugada se lanzó justo cuando la UEFA pensó que tenía un acuerdo sobre una expansión de la Liga de Campeones a partir de 2024, una reforma que fue finalmente aprobada este lunes, con el paso de 32 a 36 clubes participantes. Ahora, los mismos funcionarios que respaldaron los planes han decidido hacerlo solos mientras afirman que las competiciones existentes podrían permanecer, a pesar de perder a sus equipos más exitosos, incluido el Real Madrid, 13 veces campeón de Europa, el AC Milan, siete veces ganador.
Ceferin, junto a Agnelli en una imagen de archivo | EFE
Ceferin, junto a Agnelli en una imagen de archivo | EFE
Asimismo, el presidente de la UEFA denunció traiciones, y lanzó un duro ataque contra Andrea Agnelli, presidente de la Juventus, y Ed Woodoword, CEO del Manchester United, junto al presidente del Real Madrid Florentino Pérez entre los principales promotores del proyecto de la Superliga.“No sabíamos que había serpientes entre nosotros. Ahora lo sabemos”, comentó.
Y es que especialmente polémica es la traición de Agnelli, presidente también de la Asociación Europea de Clubes, y con quién era amigo personal e incluso padrino del hijo del presidente de la Juventus. “No hablaré mucho de Andrea Agnelli, pero probablemente sea la mayor decepción. Nunca había visto a una persona que pudiera mentir así. Hablé con él el sábado, me dijo que solo eran rumores, luego apagó el teléfono”, sentenció un molesto Ceferin.