Jaume Roures es una de las personalidades que mejor dominan el mundo audiovisual del fútbol. Actualmente Mediapro tiene los derechos de la Liga fuera de las fronteras españolas y en los bares. Quien emite la mayoría de los partidos de Primera y Segunda División en las casas particulares es Movistar Plus.
La nueva Telefónica tiene contrato hasta 2022 con la patronal para emitir el fútbol en los domicilios de España. Están abonando, en total, 2.940 millones de euros por tres temporadas. La audiovisual catalana, por los derechos internacionales hasta 2024, invierte 4.485 millones de euros. Un 30% más que el último contrato.
Mediapro es una de las operadoras más fuertes para llevarse los derechos de la Liga la próxima temporada. Pese al fracaso de Roures en Italia y en Francia, sigue manteniendo buenas relaciones dentro la patronal. Su vínculo con Javier Tebas en relación con el negocio del fútbol hace pensar que pueda partir con cierta ventaja.
Expectante a la Superliga
Pese a las buenas relaciones con el presidente de la Liga y aunque cuenta con parte de los derechos de Primera y Segunda División, Jaume Roures no descarta participar en la emisión de una supuesta Superliga europea, según ha podido saber este medio. Este proyecto, que inquieta tanto a UEFA y a las instituciones, generaría una explosión mediática.
La creación de esta nueva competición, que tiene grandes detractores como Javier Tebas, que estrena cargo en Europa, supondría un aumento en el consumo televisivo de los partidos, al menos en el primer impacto. Cada pocos días habría un enfrentamiento entre varios grandes de Europa, como sucede en el tramo final de la Champions League.
Andrea Agnelli y Aleksander Ceferin en una imagen de archivo / EFE
Tras la participación de Jaume Roures en el aval de Joan Laporta, el empresario no pierde el foco de atención en el reparto de los derechos televisivos. Mediapro ya tuvo entre 2016 y 2019 la mayoría de los partidos de la Liga --excepto El Partidazo-- y los derechos de la Champions League. Ahora los quiere recuperar.
Aunque nunca ha abogado por la creación de una Superliga europea, si finalmente se hace, Roures es de los que irían a la puja. El rédito económico que puede dejar es enorme, pero toda una incógnita. De momento, su objetivo a corto plazo es recuperar los derechos de la Liga para 2022-2025 y ganarle la partida a Movistar.
La solución de Roures
En público, la postura de Roures es contraria a la Superliga y fiel a su aliado: “Javier Tebas utiliza una frase que igual puede molestar, pero tiene toda la razón, esto se le ha ocurrido a alguien tomando una copa en un bar a las cinco de la madrugada. Porque si quieres bajar a la realidad, no estás vendiendo las eliminatorias Champions y las cantidades que se prometen ni existen”. Sin embargo, las fuentes consultadas por este medio indican que si finalmente el proyecto sale adelante, Roures no tendrá problemas en jugar a dos bandas. El negocio es lo primero.
Jaume Roures en imagen de archivo / EFE
Su solución pasa por el modelo americano, crear más espectáculo. “Es intentar copiar a los americanos para convencer a los grandes, como en lo que ha derivado la Euroliga. Pero como esto se construye contra las ligas nacionales ya les importa poco a ellos el tema. Nosotros somos los ricos y lo que pase por debajo nos da igual”, apuntó en una entrevista en MarcadorInt.
De momento, la Liga continúa resistiendo a las amenazas y en los próximos meses se decidirá quien la emitirá las tres próximas temporadas. Mediapro estará en esa puja. Si sucede algún cambio en el futuro respecto a la Superliga europea, Roures estará muy atento.