Joan Laporta se está encontrando con contratiempos inesperados en sus primeros días como presidente del Barça. El abogado no ha tardado en ponerse manos a la obra para solventar la situación crítica que vive el club, sobre todo a nivel estructural y económico. Según avanzó Rac1, la nueva junta directiva se ha encontrado con cargos triplicados, mala estructuración del club en algunos departamentos, y complicaciones económicas muy graves.
Detalles previsibles. Sin embargo, lo que no esperaba Laporta es encontrarse con tantos problemas a la hora de cerrar su organigrama deportivo. Víctor Valdés fue el primero en alejarse de su proyecto, al rechazar una oferta para ser preparador de porteros. Los planes del exguardameta pasan por asumir la dirección de uno de los equipos del fútbol formativo culé, tal y como hizo con el Juvenil A durante escasos meses la temporada pasada o como ha hecho con el Moratalaz y el Horta. Las posturas están de momento alejadas.
Valdés, en un acto junto a Joan Laporta | EFE
Asimismo, tampoco se antoja fácil la incorporación de Jordi Cruyff como nuevo secretario técnico de la entidad blaugrana. Laporta se está encontrado con discrepancias por parte de su junta directiva para firmar al actual entrenador del Shenzhen chino. Su contrato continúa valorándose y faltan todavía detalles importantes por pulir. Por lo que todavía habrá que esperar para conocer el desenlace final.
A contrarreloj
A todo esto, hay que destacar que el tiempo corre en contra de Joan Laporta. La Superliga china arranca el 20 de abril, por lo que su incorporación debería cerrarse en menos de un mes. El nuevo presidente quiere contar con Jordi Cruyff y el hijo del 14 estaría encantado de regresar al FC Barcelona. Sin embargo, todavía no ha habido un acercamiento claro, porque se está valorando todavía su contrato y las condiciones que se le pueden ofrecer.
Varios medios han apuntado en los últimos días que el club asiático es consciente del interés que tiene Jordi por volver al Camp Nou, pero por el momento no han existido contactos entre los dos equipos. De hecho, el entrenador todavía no ha solicitado al Shenzhen su salida, algo que debe hacer dado que tiene contrato en vigor.
Jordi Cruyff en una foto de archivo EFE
Deberá ser primero la junta directiva la que se ponga de acuerdo en su contratación. De momento, existen discrepancias por su contrato, lo que complica su fichaje. No obstante, su incorporación no está para nada descartada. Laporta cuenta con él como pieza determinante para la parcela deportiva, y para trabajar codo con codo con Mateu Alemany, que será director de fútbol. Pero sí es cierto que el presidente se está encontrando con más contratiempos de los esperados para cerrar su organigrama.